|Avisen de errores ortográficos|
|Estaré dedicando capítulos| ¡La persona que más puntos deje al final del capítulo y más comente, será la ganadora!
Lea
-¿Te divertiste?- le pregunté a Lucca mientras yo conducía.
-Me la pasé genial, esos niños son divertidos- sonrió.
-Lo son- afirmé.
-Vendré este mismo viernes, puedes venir si quieres- le sonreí.
-Tú avísame y yo vendré-
-¿Quieres pasar por algún lugar para comer algo?- dije mientras doblaba a la izquierda.
-Me gustaría un batido, ¿qué dices?-
-Vamos por un batido entonces- sonrió y también lo hice.
(...)
Compramos los batidos y ahora me encontraba caminando por la vereda junto a él, yendo a mi auto.
-¿De qué es tu batido?- pregunté.
-De caramelo, ¿el tuyo?-
-De fresas- hice una mueca- Está medio amargo.
-¿SÍ?- dijo con el ceño fruncido, acercándose a mí.
-Sí, si quieres puedes prob...- en menos de dos segundos, sus cálidos labios se movían delicadamente encima de los míos, dejando mi pregunta formulada a la mitad. Me sonrojé y correspondí a su beso, pasando mis brazos por encima de sus hombros, y él me acercó más a su pecho.
Lucca
-A mí me sabe dulce- dije cuando me separé de ella y no me refería al batido pero, le hice creer que sí. En realidad me refería a sus redondos labios. Mordí suavemente su labio inferior y vi cómo sus mejillas se tornaban de un color carmín.
-Entonces dame el tuyo- alzó una ceja de forma divertida. Me entregó su batido y yo le entregué el mío, del el cual tomó un sorbo.
-Mhm, está delicioso- gimió a la vez que sus ojos se cerraban y sentí mi polla despertar rápidamente ante ese hermoso sonido.
-No hagas esos sonidos, muñeca- gruñí bajito para luego tomar un poco de su batido. Se sentía un sabor amargo pero por alguna extraña razón, me gustó.
Estaba delicioso.
-¿Qué sonidos?- preguntó inocente, frunciendo el ceño y a la vez su nariz. Viéndose tierna ante mis ojos.
-Olvídalo- sonreí mientras negaba con la cabeza.
-Este batido está delicioso, nunca lo había probado- bebió un poco más del batido.
-Ahora ya lo probaste- sonreí y ella asintió con una sonrisa.
Lea
Ya habíamos terminado nuestros batidos y ahora me encontraba conduciendo hacia mi casa, con Lucca a mi lado.
-¿A qué hora vienen Dante y Bruno?- dije para sacar tema de conversación.
-Recién son las tres y media de la tarde, ellos salen de la empresa a las ocho- hizo una mueca con sus labios.
-Ahorita que lleguemos a mi casa yo podría cocinar algo rápido y podría guardar la comida en un táper para llevarles- propuse.
-Eso estaría genial- admitió- Hay una cafetería ahí en la empresa, pero Bruno no come absolutamente nada de allí y tu comida le encanta, le va a gustar esa idea- sonrió sin mostrar los dientes.
ESTÁS LEYENDO
Lea [SUSPENDIDA]
RomanceLea es una doctora de veinticuatro años. Es una chica que no cree en el amor ya que siempre tuvo malas experiencias en todas sus relaciones, pero hubo una que la marcó profundamente. Los D'Angelo al verla supieron que ella sería su mujer. Están disp...