Me encuentro deambulando por los pasillos del castillo, camino a esa pared que tú y yo conocemos mejor que nadie, Harry.
Aquel lugar que por un año fue nuestro paraíso y único lugar seguro, dónde por primera vez conversamos sin discutir, intentar cruciarnos o rompernos la cara a puñetazos.
Esa vez en la que ya no aguantabas ver mi cara de depresivo e inseguro, desde qué tuve que regresar a la fuerza a terminar el último año en Hogwarts, después de que vencieras al sádico idiota sin nariz, después de que decomisaran más de la mitad de nuestra fortuna, de que mi padre terminara en Azkaban y mi madre se fuera a Francia ¿lo recuerdas?
¿Recuerdas cómo me arrastraste por los hombros y me metiste dentro de la estúpida capa de invisibilidad de tu padre, y que yo ni si quiera puse resistencia?
Aquella fue la primera vez en la que vi la sala de menesteres cómo un lugar pacifico y no lleno de misterios y peligros, cuándo se transformó en una sala pequeña con una chimenea frente a esos 3 sofás y unas grandes y lindas ventanas.
Recuerdo que me sentaste en el sofá doble y aún con esa expresión de duda en tu cara, te sentaste en uno individual, sabía que estabas molesto y desesperado por alguna reacción de mi parte, pero no sabía que hacer Potter, pues fuiste tú el que me secuestró en primer lugar.
Cuándo ya no aguantaste y comenzaste a preguntarme qué mierda me pasaba para estar así, y te acercaste a sujetarme por los hombros nuevamente pero esta vez para zarandearme y a prácticamente gritarme que me preferías cuándo te contestaba y provocaba conflictos, y ahí cuándo yo ya no pude contenerme más...
Y entonces, me reí.
Y no una risa cualquiera, me reí a carcajadas, me reí cómo no lo había hecho desde que era un crío, cómo si no hubiese un mañana.
Pues para mi toda esa situación era hilarante, quiero decir, pasaste toda tu adolescencia odiándome, peleando conmigo en los pasillos, en clases, fui un dolor en el culo todo este tiempo, todos tus años en Hogwarts, sólo porqué el pequeño Draco Malfoy no pudo perdonar que dejaran su manita extendida y prefirieran a un Wesley sobre él.
Y nada de eso te detuvo, nada de eso impidió que testificarás a favor de mi madre y de mi frente al ministerio, para que no nos mandaran a Azkaban junto a mi padre, para que no nos quitaran todo nuestro dinero y para que todos los mortífagos jóvenes pudieran volver a estudiar.
Y yo me preguntaba ¿es que todo esto era en serio?
¿De verdad estabas molesto conmigo por qué ya no te peleaba e intentaba romperte la cara?
¿De verdad estabas preocupado por mi?
¿Extrañabas que te provocara y te echara pleito?
Tremendo idiota...
Me mirabas asustado, mientras yo sólo reía
No entendías ni una mierda
Y eso lo hacía más gracioso para mi
No entendías qué pasé toda mi juventud obsesionado contigo, usando cualquier recurso que tuviera a la mano para llamar tú atención, no entendías que me encapriché por que no quisiste ser mi amigo, no entendías que al ver al magnífico trío dorado yo sólo sentía envidia, por que yo no tenía esos increíbles amigos, pero más importante, porqué yo no te tenía a ti.
No entendías que estuve enamorado de ti por años, hasta que desistí.
Cuándo mis lágrimas y risas ya casi cesaban, y tú aún me mirabas aterrado, yo sonriendo, después de semanas de no hacerlo, te dije.
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My tears ricochet
FanfictionPotter cometió un error, y Malfoy uno más grande. Las lágrimas "rebotarán" en el piso. Un fic INSPIRADO en My tears ricochet de Taylor Swift Los personajes no me pertenecen, yo sólo los amo y quiero hacerle mil historias