Noche dos

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Noche 2

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Noche 2

*sonido de teléfono* hola hola? ¡Hola emm hey buen trabajo! se nota que tienes potencial para este puesto-

-obviamente que soy especial para el puesto, -dijo sarcásticamente mientras miraba al teléfono atentamente- básicamente depende mi vida para ser capaz de sobrevivir, cada error podría costarme la vida. –se quejó.

emm en e-este turno se complicará in p-poco más –

-QUE! ¿apenas pude con la primera noche y ahora se complica?! -no pudo no gritar del asombro y del miedo.

recuerdas de la sala de escalera? Pues la r-razón de porque Saimon más que nadie va a ese lugar, es p-para apagar la central de energía del local. ellos al ver que nadie está en el local, intentan apagar la electricidad, pero n-no te preocupes que con solo enfriar la habitación basta. Emm y los animatronicos están más activos cada vez en las noches,

-mierda! aparte de soportar esos robots, también debe mantener la idea que cada vez se mueven más rápidos. -se quejaba Ted dando una sonrisa nerviosa, seguido de risas, incomodas aparte de incontrolables, que acompañaban a sus palabras.

pues emm si tienes dudas para como manejas este puesto, anota con un bolígrafo tus dudas y e-en el turno matutino veré aquella nota y cuando te llame, te aclararé e-en lo que pueda para ayudarte en eso. Pues creo que es t-todo asique espero que tengas una linda noche, no te duermas, y sonríe ya que eres una parte importante de la seguridad y la empresa en si del teatro restaurante de Saimon Cat y sus amigos, buenas noches.

Aparte de que aquella voz reconocida duró muy poco, dejando la sensación de abandono e inseguridad, los animatronicos comenzaron a moverse provocando ruidos en el local.

-oh mierda- ese mini grito que pego era más profundo, demostraba que ya estaba como reconociendo que tendría que sobrevivir otra vez con la misma mierda de animatronicos.

No pasaron más de la 2am y Ted tuvo que soportar 3 ataques seguidos de los animatronicos. Intentó más de una vez tratar de tapar la entrada de la "Sala de las escaleras" para evitar que Saimon trate de apagar la electricidad. Pero en todos sus intentos fracasó, ya que Saimon y Tiger lo acorralaban. en una ocasión, Ted tubo que esconderse y aguantar la respiración por más de 30 segundos para evitar que ellos lo escuchasen. Fue una pésima idea tratar de salir de la cabina claustrofóbica ya que se arriesgaba mucho en intentarlo.

Pasaron las 3am y la energía quedaba solo un 50 se notaba que capaz no llegaría a las 5am con esa cantidad de luz. Pero con moderarla un poco, por lo menos llegaría más de 30 min.

todo parecía ir bien, los robots estaban legos, la habitación de la "sala de las escaleras" estaba estable, y la energía capaz llegaría hasta el amanecer, de pronto un légano sonido que provenía cerca de una de las salas de diversión, eran golpes fuertes como si tratara de derribar una puerta. Ted, sentado en su sillón, se levantó pegando un salto de aquel lugar y alarmado buscando entre cámara y cámara, pero no había algún inicio de que una puerta estaba temblando o a punto de ser derribada.

-donde carajos esta –se preguntaba, pero entre búsqueda y búsqueda se descuidó de Saimon, que entraba a la sala de las escaleras. Para cuando Ted se dio cuenta del descuido que se mandó, no tuvo tiempo para fijarse, las luces se apagaron de golpe. Y del silencio inquietante, aparte del sonido de respiración de Ted, se escuchaba en el fondo una pequeña melodía, dulce pero llamativamente terrorífica, esa melodía era reconocible, era Smile de charles Chaplin. Esa melodía Ted nunca la pudo olvidar.

estuvo un momento en silencio hasta que oyó unos sonidos de pasos. El rápidamente se escondió debajo del escritorio, esperando a que no lo vea. El robot entró a la oficina. Se escuchaba el fuerte y metálicos pasos de esa máquina, y el guardia esperando que la oscuridad también afecte a la vista de Saimon, sintió una mano que lo agarraba de la pierna y seguidamente de que le arrastrara repentinamente con la intención de sacarlo del escritorio.

-¡¡no mierda no, suéltame pedazo de chatarra!!, ¡¡suéltame deja a este hombre en paz!! ¡¡yo que rayos te hice!! ¡!lárgate!! ¡¡fuera!! ¡¡vete a la mierda!! –gritaba mientras se agarraba con todas sus fuerzas del escritorio para hacer resistencia a medida que Saimon lo jalaba haciendo caer las cosas del escritorio. Ted lo golpeaba pateándolo, le arrojo una taza de plástico con el lema de la empresa, y así con intentos desesperados para sobrevivir. Entre todas las cosas que tiró Saimon, tratando de sacar a Ted del ahí, tiró una lámpara. El intentó agarrarla con estirarse, pero no pudo ya que Saimon cada vez lo jalaba con más fuerza y necesitaba las dos manos para sujetarse. entre todos los temores de Ted, vio que Saimon lo miraba con sus pupilas brillantes de color blando que reflejaba la muerte misma, con esa mirada fría y sin sentimiento alguno, o por lo menos, sentimiento de compasión. Ted sintió como esa mirada l penetraba aterrorizándolo aún más. Era como ver un "fantasma", como pensaba. él aprovecho eso para patearle la cara, pero no funcionó, ya no podía hacer nada solo que pedir ayuda y esperar a que amanezca, y entre gritos y auxilio, gracias a su resistencia, llego a las 7am. El jaleo paro repentinamente, parecía que las suplicas y los gritos funciono de una o de otra manera a parecer. Ted Salió de su escondite con cuidado y vio que Saimon permanecía en su posición. Se fijó de la hora y se dio cuenta que estaba a salvo del robot.

No paraba de respirar agitado ni menos paraba de sudar. En toda esta montaña rusa de emociones, termino soltando lágrimas y posteriormente en llanto. Sus lágrimas pasaban por su rostro tembloroso seguidos de gemidos de angustia, casi su vida terminaba en aquella capsula claustrofóbica. arrestándose un poco para asegurarse de estar lejos de Saimon por si la duda se activa él pueda escapar, Se terminó de incorporar y salió del local en lo más rápido posible, no podía moverse bien por la impresión de casi morir.






Muchas gracias por leer esta parte se le aprecia bastante, no olvides de dejar tu comentario y tu estrella para seguir mejorando en esto. 

10 noches en Saimon CatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora