Querida Adora:
Si de niña me hubieran dicho que después de compartir tantos momentos contigo te perdería lo más probable es que empujaría a esa persona y posteriormente me escondería hasta que tú me encontraras llorando en una esquina del orfanato.
Sin embargo aquí estamos.
Hace un año que ya no estás y no puedo parar de estar sintiéndome triste. No tengo más tiempo, todos me odian por mi crimen ¿Sabes? Incluso más de lo que alguna vez lo hicieron cuando no te conocía. Sus voces son fuertes, aún más las amenazas que me llegan para intentar condenarme. Incluso así mantengo mi cara de orgullo para evitar verme débil.
"Vas a morir, voy a matarte"
Recordar que muchas veces te dije lo mismo por pequeños problemas me hace sentir peor, jamás creí que en algún momento realmente lo haría.
Eras mi buena amiga y por eso te salvé antes de todas las tonterías que hiciste.
Desde que dejamos de ser unas niñas te transformaste en una idiota sin remedio que cada vez se hundía más en su mierda. Siempre traté de ayudarte a salir adelante, sin embargo cuando me hiciste creer que ibas a mejorar, que te habías vuelto buena para después querer más y apuñalarme por la espalda lograste que llegara a mi límite. Al final te salió peor.
¿Por qué tenías que provocarme?
Solamente lograste que te golpeara y terminara viendo tu cráneo sangrar.
Por ti ahora me siento triste.
«Vas a morir, voy a matarte»
Son las palabras que no me dejan ni dormir cuando cierro mis ojos.
Estoy sin ideas, no tengo ningún lugar para correr. Lo único que me queda desde que te fuiste de este plano es bajar la mirada a la pistola entre mis manos intentando decidir si apretar el gatillo.
Sueño con voces en mi cabeza. Tengo delirios y ellos se burlan de mí recordándome que mi mejor amiga está muerta ¿Cómo se supone que lidie con esto?
"Vas a morir, voy a matarte"
Algo que se repite en mi mente una y otra vez pero que aún así no me hace sentir culpa. Es irónico porque de todas formas derramé una lágrima pensando en ti.
Vi tu cuerpo muerto con la sangre esparcida y un pájaro cantando una canción. Hasta el día de hoy estoy segura que todo fue para ti.
Afuera está cálido y los cielos son azules ¿Pero yo? Carezco de sentimiento positivo alguno desde aquel momento que me marcó más de lo que creí.
No puedo evitar sentirme azul cada que pienso en ti y en lo que pudo haber sido de nosotras si hubiéramos hecho las cosas diferentes.
Si hay algo que lamento es no haberte dicho que aunque te llegué a odiar también te amé con cada parte de mi ser. Si en otra vida tengo una nueva oportunidad juro que aunque me cueste todo lograré decírtelo, voy a tratar de arreglarlo.
Esta vez todo estará mejor.
Te prometo que pronto nos veremos nuevamente.
Atte: Catra.
