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"A veces estas tan solo que tiene sentido"
Charles B.

—Perfecto nena, estamos felices de que vengas, ¡tienes que ver la remodelación de la casa! Nana se superó— parloteaba Hange al teléfono.

—Y la venta del vino "Dolce vide" esta por lo cielos, ya te contaré cuando estes acá, Artemis te extraña.

—Y yo a ustedes Hans, prometo avisarles cuando ya este aterrizando, las amo—

Mikasa se encontraba cerrando su valija, por fin regresaba a casa, después de casi 5 años de universidad; estudio enología, para poder apoyar a sus tías con la producción y el cultivo de las cepas, cosa que se le da de maravilla por cuestiones que ustedes ya saben.

Estaba feliz de volver, el pasado doloroso con Jean solo era un triste recordatorio que llevaría para siempre, el recuerdo de que jamás debe volver a cometer una equivocación.

Horas más tarde un paisaje muy familiar la recibía, kilómetros y kilómetros de vides moradas, verdes, grandes olivos le daban la bienvenida, llegaron a la reja donde una casa tipo chalet se alzaba orgullosamente, La casa de su infancia...

—Ponte cómoda cielo— le decía Nanaba mientras cargaba su equipaje.

se le hizo raro que lo subiera ella y no simplemente moviera los dedos para mandarlo directo a su habitación.

—Vampira, antes de que cenemos hay algo de lo que tenemos que hablar— le dijeron ambas casi al unísono.

—Luego Hans, tengo hambre— Mika se dio vuelta y agito la mano para hacer levitar un plato cuando una forma más baja que ella colisionó contra su cuerpo, ambas personas cayeron refunfuñando.

—Bueno, ahora todo será más fácil, Mika, él es Levi, nuestro contador, administrador y gerente de marketing— dijo Hans.
—Y vive aquí con nosotros...— continuo

No le hizo nada de gracia, después de las disculpas de sus "hurracas" no le quedó otro remedio que aceptarlo. Pero le sulfuraba tener que hacer cosas como gente normal, nada de magia.

—Pinche Muggle— pensaba cuando lavaba la ropa.

Si Mikasa tuviera que describir a Levi diría que es rígido como un palo, sin sentido del humor y que tiene una cosa insana con el orden y la limpieza, no le caía muy bien, y lo peor es que a el parecía no importarle su presencia, solo le había hablado para lo estrictamente necesario.

Ahora que había regresado a su hogar definitivamente los azabaches se vieron obligados a trabajar juntos, Mikasa salía temprano a revisar las vides y restaurar las que estaban secas, pasaba el día trasplantando y cultivando nuevas cepas, mientras Levi se dedicaba a las cuentas y las redes sociales vinícolas.


Una buena tarde la srita de la casa le pidió el favor a Levi de fotografiar unas vides que le parecieron buena publicidad, Pensaba crear un vino especial de ellas, parecían doradas con la luz, tal vez pudiera hacer que su sabor fuera muy dulce.

el sol en medio del campo era abrazador y seco, perfecto para la uva y terrible para el ser humano, ambos maldecían por lo bajo empapados de sudor y colorados

—Espera, mocosa ya no puedo mas—

Ella lo miro feo por atreverse a decirle mocosa y estuvo tentada a aparecer un hormiguero donde se había sentado.

—Descansemos un poco, si tan solo hubiera un corriera aire fresco—. Se lamento la muchacha.

El hombre abrió un ojo azul y la miro mas cansado por el calor que por la obviedad que salió de esa linda boca en forma de corazón.

INCANTATEMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora