Frío... el frío el lindo, la sensación de sentirte abrigado con un café caliente te hace sentir en paz. Pero si lo que se siente frío son tus palabras ¿eso estaría realmente bien? No. Miro la hora en el reloj, enciendo la pantalla una y otra vez en busca de una respuesta. No hay señales de ti. Empecé a buscar una respuesta a lo que está pasando, luego de que eso en mi corazón... no, mi cabeza. Es imposible que el corazón controle una emoción, pero porque duele cada vez que hablas y luego te vas, justo ahí en mi pecho y a juzgar por como se siente es el... corazón. Comencé a pensar. Mi mente no para de crear situaciones ficticias tratando de averiguar qué pasa ¿Acaso no soy importante? ¿encontraste a alguien? ¿volver a sentir esto me hizo volver a ser frágil? ¿cumplirás la promesa de no lastimarme? Evidentemente se que cuando hablas, hablas en serio y tratas de esforzarte para lograrlo, pero me siento mal por pensar que no es suficiente. Tu inconstancia es dolorosa pero entendible, crecer es darte cuenta que si no tienes tiempo no es porque no valoras a alguien sino que ahora hay cosas más importantes que un sentimiento. He llegado a pensar tantas cosas que ya no se que es real. Confío en ti y en lo que dices, pero sería más fácil si lo que dices por mucho que cueste se sintiera real, porque no se si lo que pienso es la verdad ante mis ojos o mis inseguridades apoderándose de mí. Solo necesito paz. Estoy cansado de tener sentimientos titubeantes.
