Tú y Haechan entran a tropiezos en la habitación del hotel, las risas llenan la habitación mientras cierras la puerta detrás de ti.
TN:-- ¡No puedo creer que se enamorara de eso! -- exclamas mientras te quitas los zapatos.
Haechan se apoya contra la pared detrás de él mientras se limpia los ojos de lágrimas y niega con la cabeza.
Haechan:-- ¿Viste su cara? Esa cara está impresa en mi cerebro por el resto de mi vida -- dice a través de otra carcajada.
Resopla y niega con la cabeza mientras se gira para dirigirse al baño y enciende la luz.
TN:-- Sabes que se le ocurrirá una manera de vengarse de nosotros.
Se encoge de hombros mientras te sigue mientras arroja su chaqueta en una silla cerca de la puerta de la habitación.
Haechan:-- Entonces tendremos que pensar en algo aún mejor -- responde, arqueando las cejas.
Ambos se quedan en silencio mientras se giran para iniciar la ducha, él mirándote mientras te mueves por el baño.
Te detienes en medio de agarrar una toalla y le lanzas una mirada curiosa.
TN:-- ¿Qué? -- preguntas, inclinando la cabeza hacia un lado.
Se lame los labios y empuja el marco de la puerta en el que estaba apoyado, y da un par de pasos más cerca de ti.
Haechan:-- Nada -- dice con una pequeña sonrisa jugando en sus labios.
Entrecierras los ojos, desconfías de sus intenciones y niegas un poco con la cabeza.
TN:-- Lee Donghyuck, te conozco demasiado bien. Estás de humor travieso y no confío en ti.
Sus ojos se agrandan, fingiendo inocencia, mientras presiona una mano contra su corazón.
Haechan:-- Guau.. realmente duele. Debes saber que siempre puedes confiar en mí -- te dice mientras se detiene a un paso de ti.
Lo estudias por un momento y giras los ojos, aunque una sonrisa está tirando de las comisuras de tu boca.
TN:-- Confío en ti casi todo el tiempo. Ahora mismo no es uno de esos momentos -- bromeas mientras te vuelves hacia la ducha.
Justo cuando abres la puerta y alcanzas para probar el agua, sientes las manos de Haechan en tu espalda, empujándote suavemente, pero aún lo suficientemente fuerte como para hacerte tropezar con el chorro de agua. Jadeas cuando el agua ligeramente helada te golpea, empapándote instantáneamente.
