octavo abrazo

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era la última noche en aquella cabaña y la fuerte lluvia parecía no tener fin.

—zaynie —susurró el pequeño castaño, asustado por la lluvia —, ¿estás dormido? es que tengo miedo.

escuchó la cama de al lado chirriar y unos pequeños pasos acercarse a él.

abrió los ojos y, por las pequeñas luces que los rayos emitían, vio al castaño parado frente a él, con sus ojitos azules llenos de miedo.

suspiró y se puso de lado, levantando las sábanas para dejar a su vecino acostarse con él. —ven, duerme aquí.

louis sin dudarlo, se metió a la cama y lo abrazó fuertemente de la cintura, escondiendo el rostro en su pecho.

zouis ;; abrazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora