Nerviosismo. El aire que respiro parece estar más equilibrado con Carbono que con Oxígeno… me asfixio aquí adentro. Acomodo mi corbata y doy una mirada rápido hacia mis zapatos. Sí. Definitivamente siguen limpios.
¿Alguna vez has sentido que tu vida depende de algo? Bueno, durante mi vida, la mayoría de las personas me han dicho que está mal depender de algo… aunque creo que lo dicen porque se aprende a desconfiar de las personas. Pasa algo como una infidelidad de una persona que querías demasiado y tu confianza hacia la gente desaparece como las cucarachas al prender la luz. Bueno, eso le paso a mi mejor amiga, Carla. Carla salía con este chico… Marcos. Y para no aburrirlos con un drama total, el la engaño con Dina, la que era nuestra mejor amiga también… desde entonces Carla no confía en nadie más que en mi… y no la culpo. Soy el tipo de chico que guarda toda la información más preciada con su vida y bueno… también, aunque quisiera contárselo a alguien… no tendría a nadie a quién rebelárselo. Así son las cosas, en nuestro pequeño mundo de fantasía… Carla y yo somos uno solo.
En fin, volviendo al “depender de algo”, estoy a punto de tomar una de las decisiones más importantes de mi vida. Soy escritor y estoy en MEXBROS. Acabo de escribir la historia más apasionante que mis neuronas pudieron exprimir de mi creatividad a mis actuales dieciséis años. “Nada mal, niño” dijeron mis padres en cuanto leyeron mi novela… espero que ese nada mal se convierta en un “es lo más asombroso que leído en toda mi vida” a la vista del director de la editorial.
Carla dijo que pasaría por mí en cuanto terminara mi entrevista. Seguramente me obligará a ir por un poco de helado si todo esto sale mal… aunque bueno, ambos nos mantenemos positivos y esperamos que realmente todo salga de la mejor manera.
Dios, esto es tan importante para mi… estoy sudando como cerdo y no puedo quitarme este saco tan asfixiante. Si el señor Mendoza me nota nervioso, seguramente me negará la impresión de mi libro por ser tan inseguro de mí mismo. Joder… ¿y si pasa eso realmente? El no necesita a un escritor así en su editorial y bueno, sinceramente no me necesita. Hay más de mil escritores en espera de ser recibidos en MEXBROS y yo fui el quinto afortunado en ser recibido… ojala no me pase lo mismo que a los primeros cuatro escritores que seguramente en estos momentos desecharon todo cuaderno, libro, pluma, portátil, televisión, y todo cualquier objeto que les recordara a una historia de novelista.
El señor Mendoza leyó mi libro desde hace un mes. Espero que realmente le haya gustado. Es decir, bueno… a los que les permití leerlo les fascino, o quizás solo les gusto porque son personas que me quieren y valoran el año sabático que me tome para poder hacer realidad mi sueño de convertirme en el escritor más reconocido en todo México… bueno, el segundo mejor. El mejor escritor es Carlos Cuauhtémoc Sánchez.
— ¿Domer Jergal? —pregunta la joven secretaria del señor Mendoza poniéndose de pie. Parece que batalla un poco al pronunciar mi nombre…
Papá. Mamá… de todos los nombres que hay en el mundo… ¿tenían que inventarme uno tan horrible como Domer? Mejor me hubieran nombrado Sancho Panza si es que les apetecía avergonzar a su joven hijo adolescente.
—Soy yo —digo poniéndome de pie. La secretaria me sonríe de lado.
—Por supuesto. El señor Mendoza te recibirá en su oficina.
¿Cómo que “por supuesto”? ¿A qué se refiere con eso?
—Muchas gracias —sonrío de vuelta.
La secretaria me encamina por un ancho y largo pasillo.Parece una enorme biblioteca. El pasillo tiene a sus costados libreros. Supongo que son todos los libros que ha producido MEXBROS. Se observa la oficina de Mendoza al final del infinito camino. En estos momentos me siento como el protagonista de una historia… mi historia. Cuando sea famoso, alguien debería escribir una novela sobre mis vivencias. La vida debería ser así siempre de expectante…
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Libros, vida y Adarah Vázquez.
Teen Fiction"La vida no depende de cosas, y mucho menos de personas." Eso es lo que todos nos han dicho en toda nuestra vida... ¿pero por qué deberíamos afrontar todo solos? ¿Por qué no juntar fuerzas? Como en Luna amarga... las personas llegan a ti con el fin...
