Ya no me evites.

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Horacio.

Han pasado un par de días desde que me quedo en casa de Volkov y la estadía ha sido cuando menos interesante.

El primer día tras tomar mi baño me vestí con un jogger gris y una musculosa blanca que era con lo que solía dormir cuando las circunstancias no permitían ir desnudo, y cenamos tranquilamente el Pelmeni que hizo Volkov para la cena, era un plato nuevo para mí pero estaba realmente rico, según me comento era algo que se comida comúnmente en rusia, algo que no pude pasar por alto fue la timidez con la que me sirvió el plato y como se iluminaba su rostro cada que señalaba los bien que cocinaba. Luego de la cena se dispuso a ayudarme con mi vendaje, yo me recosté sobre el sofá de la sala y el se sentó en la orilla del mismo, al momento de quitar mi camiseta se formo un lindo sonrojo en sus mejillas, sus delicadas manos acariciaron la piel alrededor de mis vendajes para luego retirar cuidadosamente los mismos, limpio la zona y puso los nuevos vendajes, volvió a acariciar la zona y se levantó para traer mis medicamentos, una ves todo listo me ayudo a llegar hasta mi habitación.

La rutina se ha repetido los últimos días, Víktor me evita, no se me dirige a menos que sea por algo de mis cuidados y para responder algunas de las preguntas que le hago, lo noto tenso, nervioso, verlo con su ropa de casa es encantador, muy distinto a lo que uno se puede llegar a imaginar, usa bastantes suetres con magas largas y mucho mas color del que espere, cada que desayunamos el va en pijama y yo vestido, luego de comer me acomodo en el sofá y el se va a cambiar, cada que sale de su cuarto lo hace con timidez y pasa rápidamente frente a mi, imagino que no esta acostumbrado a que lo vean vestido tan distinto a lo que suele usar para el trabajo.

Su conjunto del día de hoy lo vi salir vestido igual que el resto de días con un lindo conjunto y pasando rápido frente a mi con sus manos dentro de las mangas de su polerón.

Su conjunto del día de hoy lo vi salir vestido igual que el resto de días con un lindo conjunto y pasando rápido frente a mi con sus manos dentro de las mangas de su polerón

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Pero ya no soportaba el tenerlo tan cerca y que nuestra interacción sea tan...fría? No estoy seguro pero no me gusta, así que cuando esta pasando frente a mi lo tomo de la cintura evitando que siga avanzando y lo dejo sentado a mi lado.

H- Eeyyy, ya deja de evitarme-

V- C-como?- dijo con la mirada baja.

H- Eso, que ya no me evites, casi no me hablas a menos que sea algo sobre las heridas, te veo cada día pasar corriendo vestido así de lindo frente a mi como si yo te fuese a decir algo, me explicas que pasa?

V- Cr-cres que me veo lindo?- dijo levantando la mirada y muy sonrojado.

H- Claro que si, te ves precioso, amo tu estilo, pero no me dejas ni alagaste.

V- B-Bueno es que noc... creí que pensarías que me veía mal, ya sabes, no es lo que suele usar el comisario, y en cuanto a lo de hablar, no se muy bien de que hacerlo, no soy alguien muy interesante.- dijo jugando con sus manos.

H- Ay vik, mírame- dije tomando sus mejillas- Cuando te he dicho yo eso?

V- Nunca pero- lo interrumpí

H- Exacto, nunca te lo he dicho porque me encanta hablar contigo, me gustaría que me muestres tus aufits, sabes que amo la moda, estaría encantado de que me hables sobre tu anime favorito, de tu cantante favorito, de lo que quieres hacer a la cena, de tus inseguridades. Ya no me evites.

Víktor solo asintió con su cabeza aun entre mis manos.

H- Vale, gracias, que te parece si hoy vemos una peli?

V- Estaría bien, podría hacer palomitas.- sugirio.

H- Pues perfecto, entonces tendremos una noches hoy, por ahora que te parece si me hablas sobre que exquisitez prepararas para almorzar hoy.

V- Bueno hoy me gustaría hacer una Sopa Borch, la solía comer de niño, esta echa de remolacha y...

Estuvimos hablando un buen rato de diversas cosas, pude ver la emoción con la que hablaba, las sonrisas y sonrojos ocasionales no faltaron y cada que las presenciaba me quedaba sin aliento, la charla acabó cuando fue a preparar la comida, me gustaría poder cocinar con el o talvez prepararle alguno de mis platos estrella, pero aun estoy restringido por la cilla, se supone que para la próxima semana debería poder empezar a moverme con la muletas, pero hasta entonces solo me queda verlo desde la sala. Para armonizar el ambiente decido poner algo de música en la tele.

Veo como menea sutilmente sus caderas y joder, no puedo ocultar una sonrisa, subo el volumen de la música y junto a este aumenta el movimiento de su cuerpo, las ganas de tomarlo de la cintura y bailar juntos me matan, sus labios se mueves cantando las canciones sin emitir sonido alguno, es encantador.

El almuerzo transcurrió entre charlas tranquilas, todo estaba delicioso como de costumbre, tras el almuerzo yo me tuve que recostar ya que tenia que tomar un medicamento que me provocaba mucho sueño, pero cuando me estaba recostando me dio una puntada en el abdomen que me hiso soltar un quejido que alerto a Víktor, quien vino rápidamente a revisar como estaba.

V- QUE OCURRE, estas bien?!- dice cuando entra a mi cuarto.

H- Si no te preocupes solo fue una puntada.- dije para tranquilizando, aunque debió notar en mi rostro que me seguía doliendo ya que se hacerco donde estava y levanto descaradamente mi camiseta.

V- que bien, no se te abrió ninguna herida- dijo solto un suspito.- necesitas algo, se ve que te dolio.

H- Sabes cual es el mejor remedio para los dolores?

V- Anestecia?

H- Que? No, hablo de mimos.

V- Am horacio yo no creo que sea..

H- Venga solo un poco, asta que me duerma, esq con este dolor tan inmenso no podre- dije haciendo cara de dolor.

V- Si tienes un dolor tan inmenso quizás debería llevarte al hospital.

H- NO, no es tan inmenso como para hospital, pero si como para no dejarme dormir en paz.- Volkov no se veía muy convencido.

H- Mira solo conque te acuestes aquí un momento es suficiente para mi- dije palmeando al lado mío- Porfavooooor- dije haciendo un puchero.

V- Vaale, eres como un bebe- dijo rendido.

Se acostó a mi lado y yo me habrase a su pecho, a los segundos ciento como una mano se posa en mi cabeza empezando a dejas masajes en esta y como otra mano delicada me acaricia suavemente la mejilla, no pude evitar que una de mis manos acariciara inocentemente su cintura mientras lo abrasaba.

V- Te dolió mucho?- dijo en un susurro que pude escuchar perfectamente debido a nuestra cercanía

H- Sip, dije que era un dolor inmenso- dije obvio, aunque solo exageraba. Volkov soltó una risilla.

V- Entiendo, crees que debamos posponer la película?

H- Claro que no, que con esto y una buena siesta estaré como nuevo para la noche.

No recibe respuesta mas que más mimos en mi cabeza, en esa posición podía percibir el rico olor de su perfume, el sonido de su respiración, su pecho subir y bajar, el es tan perfecto, con la mano que permanecía acariciando su cintura me atreví a suavemente introducirla bajo su camiseta para poder proporciónale caricias directo a su suabe y cálida piel, el como respuesta se tensa pero segundos después se vuelve a relajar permitiéndome continuar, su cintura era fina, moví algo mi mano pudiendo percibir los músculos marcados de su abdomen, escucho como un suspiro sale de sus labios, no tenía intenciones de pasar a más, pero debo admitir que me emociono que me permitiera hacer aquello.

Al rato, y gracias a los masajes de mi cabeza, caigo dormido, abrasado a un cuerpo fino y fuerte a la vez, y envuelto en una calidad inmensa. 

Yo te enseño a amar - ✨ Volkacio ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora