¿Qué puede hacer un hombre cuando estas donde nadie ve? ¿Dónde puede huir para escapar de tu destino, de tu pasado?
Alexei decidió regresar a la Capital, después de todo antes era un prestigioso ingeniero industrial con un poder adquisitivo muy superior a la media.
Quizá esta es mi oportunidad de volver a ser quien algún día fue.
Sin embargo, la ciudad estaba atravesando la peor crisis de la historia, la pandemia y 15 años de socialismo han pasado factura.
La economía está destrozada y una marea de mendicidad, consumo de drogas, la capital ya no es la ciudad vibrante que alguna vez conoció.
Los meses pasan, el desempleo es lo único que tiene para deglutar hoy, un mensaje malicioso llega a su celular cargado solo deseo de destruir más a algo que ya estaba roto.
Fotos íntimas cargados de sexualidad, de encuentros furtivos entre Rainer el enviado de Dios y Karla.
Por meses Alexei había guardado luto por la relación con la mujer que alguna vez fue dueña de su dulzura.
Mientras Alexei se desgarraba el alma llorando a grito herido la ausencia de su prometida, ella atendía las necesidades carnales del ahijado de don Vera.
Pero esta mañana ese mensaje no solo terminó de quebrar a este hombre. Hoy Alexei perdió su religión, él fue juzgado y condenado por no pertenecer a un sequito, fue tachado de corruptor.-Si no pertenezco a la gracia divina entonces me entrego a las sombras, pues estoy envenenado de tristeza y dolor.
El cielo no alumbra más mi camino, este solo está marcado de sangre y dolor, hoy renuncio a ti, renuncio a todo.
Hoy renuncio a ti.Esa misma tarde, Alexei limpió su rostro, se duchó y se colocó su mejor traje.
Alexei lucia muy elegante, negro totalmente y una corbata roja, su mirada emanaba un envolvente misticismo, su cabello largo y negro se enmarañaban en una masculinidad tan impropia de su alma rota.
Eran un metro setenta de impulsos, un corazón inexistente, una mirada vacía, sin alma.El olor a cocaína y marihuana inundan cada esquina, a instantes autos lujosos pasan por el Hostal "El imperio" otras veces solo salían motocicletas y otras veces solo pobres diablos entraban y salían.
Nos encontramos en esa parte de la ciudad que todos ignoran pero en el fondo desean.
Ese lugar prohibido donde el libertinaje es la ley, las balas son justicia, las drogas son las monedas de cambio.
Un lugar donde todos los estratos sociales convergen fundidos en sus bajos deseos.
Entre esta podredumbre embadurnándose de bajezas camina Alexei.
Camina entre viciosos y parias en busca quizá de perderse también e ingresa en las puertas del Hostal.
En la planta baja se encuentra un muy concurrido bar, un verdadero epicentro de perversiones.
¿Qué universo es este?
Formales ejecutivos con lujosos relojes compartiendo su espacio con jóvenes claramente de un estrato social bajo, obreros de la construcción e incluso malandros muy mal encarados, junto a ellos bellas damas sensuales, desbordando pasiones.Las puertas del bar se han abierto y de la luz emerge un hombre, blanco con un cabello negro algo alborotado, Alexei.
En una mesa junto al ingreso una espectacular rubia con un vestido rojo se levantó y camino hacia la barra del bar.
Ella apenas notó a Alexei, sin embargo, él quedó obnubilado por su sensualidad por el movimiento tan sensual de su espalda baja y ese cabello, esa cascada dorada que baña su espalda.
Alexei quería ser el lobo que devora a esa sensual caperucita roja, pero por más que su cuerpo la deseé, por años se acostumbró a ser de una sola mujer, a cumplir a una sola.
No es un galán, un conquistador, no es el experimentado casanova que desearía.
En el fondo sigue siendo un inocente chico que juró amor eterno, el chico dulce y fiel.
¿Cómo hacer que la rubia más sensual del lugar se fije en él?
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Entre el sexo, la depresión y otros vicios
Подростковая литератураAlexei se encuetra aprisionado entre las heridas de su pasado, el dolor de su soledad y el abrazador calor de su lujuria, adentrate en los relatos de como un hombre fiel que termina cayendo en las garras del sexo sin amor.