SQUID GAME [RIVAMIKA]

CAPÍTULO ÚNICO

Mi vida era una mierda. Intentos que llevaban al fracaso absoluto. Pero soy responsable, hice de todo una desgracia, como si hubiera hecho un pozo para mi propia tumba. Todo empeoró desde aquel accidente ocasionado en plena carretera. Un hombre conduciendo en estado de ebriedad arrebató la vida de mi madre. Sinceramente, hubiera preferido morir en su lugar. Hubiera deseado que ella se quedará en casa y que me dejara ir a la tienda para comprar y hacer de cenar pero no. Mi madre prefirió que me quedara y la esperara, no quería que me pescara un resfriado, era pleno invierno y yo apenas tenía diez años de edad.

Mi vida a partir de ese momento cayó en desgracia. Luego de la muerte de mi madre quedé bajo cuidado de mi tío pero su ausencia era como estar en soledad. No culpo a Kenny, agradezco todo el esfuerzo que hizo para criarme y cuidarme pero él siempre estaba ausente debido a su trabajo. Incluso hacía horas extras para darme una vida digna. Sin embargo, esa misma vida que costó tanto sacrificio tuvo su lamentablemente recompensa. Kenny contrajo cáncer de estómago, el dinero no alcanzó a cubrir los gastos para sus tratamientos y a los tres meses murió. Al menos dio su último aliento mientras dormía. Su partida fue pacífica y silenciosa. 

Kenny me dejó una carta expresando lo mucho que me amaba y lamentaba jamás haberlo dicho. No lo culpé, asumir una responsabilidad paterna no debió ser fácil pero cuidó de mí como si fuera un hijo más que su sobrino. 

A pesar de todo, Kenny me dejó dinero para que pueda mantener la economía de nuestra casa hasta que consiguiera un trabajo. Afortunadamente lo logré, incluso pude estudiar, graduarme y trabajar para una importante empresa inmobiliaria. No obstante, las desgracias no tardaron en regresar. La empresa quebró y despidió a muchos empleados, incluyéndome, sin darnos la paga del mes. ¿Cómo podía continuar? ¿Cómo mantendría los impuestos de mi casa al día? ¿Qué debía hacer? Estaba perdido.

Intenté conseguir otros empleos pero ninguna empresa quiso contratarme. Todos los cupos estaban llenos. El dinero se agotaba y apenas me preocupaba en comer. Entonces cometí el peor error de mi vida: sacar un crédito hipotecario en el banco.

Al principio pude pagar los impuestos vencidos pero el dinero no perduró, seguía sin obtener un empleo. El plazo de las cuotas llegó a su límite y como consecuencia el banco me quitó las escrituras de la casa. En otras palabras, tuve que vivir en la calle y hundirme en la miseria de los inhóspitos callejones de la ciudad. 

Muchos se preguntarán "¿Acaso tenías amigos? Ellos podrían ayudarte" pero mi respuesta es no. Debo confesar que me preocupé tanto por mi mismo que jamás me molesté en socializar y eso me llevó al fracaso. Tampoco conocí el amor ¿Qué se siente estar enamorado? ¿Darlo todo por esa persona y viceversa, decirle y demostrarle lo mucho que la amas? Alguien a quien demostrarte lo mucho que significas en tu vida hasta el punto de sacrificarse. 

Mi madre y mi tío se sacrificaron por mí, siempre se preocuparon por mi bienestar, y yo jamás les agradecí, jamás me sacrifiqué por las personas que amaba. Me hubiera gustado estar en sus lugares y morir para que tengan una hermosa vida. Ellos no merecían ese final. Todo fue mi culpa.

Todo cambió cuando pedía limosnas en la estación de tren. Mi atuendo era horripilante y mi olor demasiado desagradable. No tenía tiempo de afeitarme, me descuidé y parecía un duende de jardín, solo me faltaba la gorra.

Un extraño hombre se acercó en mi dirección. Sospeché que se trataba de un abogado, contador o empresario importante. La apetencia que portaba sobre sí mismo era envidiable. Antes de que me saludara le dejé en claro que era ateo y no creía en dios, así se ahorraba los sermones, pero él sonrió y me aseguró que no tenía ningún interés religioso. Me platicó acerca de una oportunidad para ganar dinero. Al principio no me mostré interesado pero cuando aseguró la cantidad y que cubriría todos las deudas que debía, no dudé en aceptar. Además prefería mil veces esa opción antes de ser arrestado.