Semilla

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¿Que hacer para que esa persona especial te acepte?

Es verdad, ni siquiera se su nombre, no sé nada de su vida pero dentro de mi se que es el, la persona con la cual yo quiero compartir mi vida

Desde ese momento no lo deje escapar, lo seguí, al fin sabía dónde vivía, era muy alejado de aquella villa, tenía su propio jardín para cultivar, por ello no dependía por completo de las cosas que se conseguían en la villa, esa era la razón por la cual no le ví más

Ya con su ubicación volví por mis pertenencias y ahora debía hacer un techo para resguardarme, no era tan fácil como llegar y tocar su puerta, para decirle

" Hola, el amor de tu vida ha llegado por ello ahora viviré a tu lado para siempre"

Estoy seguro que me cerraría la puerta en la cara

En una semana trabaje en una pequeña cabaña, era un espacio reducido donde tenía lo esencial, una cama y un pequeño horno de leña afuera de esta, una mesa y listo, yo no necesitaba nada, claro está el se molestó, fueron muchas veces que me gritaba que no podía construir a su lado, para mí era emocionante pues aunque fuera con gritos eran nuestras primeras charlas

Estoy cocinando mientras le veo trabajar, vaya que es muy trabajador he notado que se levanta desde antes que el sol salga, va por agua al río ( queda un poco lejos), hace ese recorrido unas cuatro veces, al llegar se pone a regar su jardín, ve sus cultivos y luego si hay algo que cosechar lo hace, entra a casa, lo más seguro a comer, no le veo hasta después dónde sale con un arco a buscar alimento al bosque, es ahí cuando yo también voy, y la plática que es costumbre inicia, le digo que es mejor así yo lo cuido, regresa a casa y entra, lo veo más tarde antes que el sol se oculte, se encuentra leyendo un libro, cuando las primeras estrellas aparecen el tiene una gran sonrisa en su rostro, yo dejé de ver el cielo para empezar a perderme en ese rostro, luego entra y no lo veo más hasta un nuevo día

Ya llevo observando dos meses, y me alegra ver qué nadie lo pretende, que nadie está rodeando a la persona que quiero a mi lado pero también me pone triste saber que es muy seguro que no tenga familia, pues como digo nadie viene a verle, el jamás va a ver a nadie, y lo sé porque lo sigo, es como un hermitaño, aún así lo acepto tal y como es, yo tengo mis defectos, yo soy muy escandaloso y lo admito, soy así y no puedo cambiar

El es tan tranquilo y yo todo lo contrario de el, por ello se que somos el uno para el otro

El primer día del tercer mes, cuando el se fue a dormir me puse a trabajar en un regalo para el, comencé a trabajar en un sistema para traer agua del río a su hogar, y del paso al mío porque ya me cansé de ir por agua al río, tarde toda la noche pero casi termino

A primera hora nos topamos, el venía cargando sus botellas, yo estaba todo lleno de lodo con una gran sonrisa en mi rostro

- oye tengo una sorpresa, será bueno para ambos-

Fuimos de regreso claro está el me grito en todo el trayecto diciendo que por mi culpa se le haría tarde en todo su día, solo sonreía

- descuida con esto te estoy ahorrando una gran cantidad de tiempo-

Esperaba que funcionará, quite la pequeña puerta y el agua comenzó a fluir, el estaba sorprendido pero no podía parar, acabamos todos empapados y el me golpeó con aquellos botellones pero note una gran sonrisa en su rostro

Así comenzaba una nueva rutina, el se ponía a regar sus plantas y yo a trabajar en retener mejor el agua, cree una especie de lago pequeño , siempre me gustó cavar y fue muy entretenido para mí, con esto me resultó más sencillo comenzar a hacer grandes mejoras

Siempre a tu lado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora