Prólogo

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Las clases ya habían terminado y casi todos los alumnos estaban rumbo a sus casas, pero en un salón ocurría una reunión de último minuto para tomar una decisión que podría cambiar radicalmente el estatus deportivo de Hexside.

Boscha: Entrenador ¿Acaso ésto es una comedia para usted? La temporada ya empezó y ¿Quiere meter a novatos al juego? Su incompetencia nos hará perder la racha.

Entrenador: Ellas tienen el potencial que caracteriza a las Banshees. Y si tanto crees que son incompetentes, entrénalas tú.

Se quedó con la palabra en la boca sin saber que responder o cómo reaccionar. Ella tenía una reputación que mantener y por eso hacía años que se alejó de Willow, primero fue Amity quien decidió evitar juntarse con ella y luego ella la imitó, sus padres estaban complacidos con esa acción y esto definitivamente había arruinado su día y de paso su fin de semana.

¿Cómo le diría a sus padres que ahora debía pasar tiempo con su ex-amiga y con la chica hoja? Ya lo pensaría luego, pero ahora se le había ocurrido que ésta oportunidad sería perfecta para planear una venganza y de paso las mejores bromas de su vida hasta ahora.

Boscha: Si eso es lo que usted ordena profesor, las prepararé antes del próximo juego.

Entrenado: Me parece perfec-

Boscha: Pero tengo condiciones.

Entrenador: Claro, dímelas.

Boscha: Okay primero nadie interferirá en las horas de práctica; segundo, serán cuatro días a la semana; tercero, usaré los métodos que crea necesarios y por último yo me encargaré personalmente de los almuerzos de la cafetería para las novatas.

Entrenador: Consideralo hecho, las dejo en tus manos capitana. No me decepciones.

Boscha: Bueno, eso fue fácil.

El entrenador hizo un gesto con la mano y esa fue su señal para salir del salón y poder regresar al fin a la comodidad de su hogar.

Mientras avanzaba por los pasillos iba rumiando maldiciones hacia quien consideraba perdedores y ahora debía ver cómo miembros de su equipo, SU equipo, SU familia, aquella que Amity traicionó una vez y había jurado que haría hasta lo imposible para evitar que se vuelva a unir. Pero el entrenador tenía otros planes y no podía desobedecer.

Caminaba tan metida en sus pensamientos que no se dió cuenta que estaba apunto de chocar con alguien hasta que fue demasiado tarde.

Boscha: Oye idiota fíjate por dónde vas.

Luz: O-oh Boscha perdón yo-

Boscha: Ugh de todos los alumnos de Hexside debías ser tú, perdedora.

Luz: Je si, yo Luz Noceda, no olvides mi nombre que yo no olvidé el tuyo. Haré lo que me diga capitana.- ¿Luz idiota qué acabas de decir?

Boscha: Hmmm me gusta tu actitud orejas redondas.

Empezó a caminar rodeándola como un lobo acechando su presa, la miraba de pies a cabeza con su tercer ojo mientras con los otros dos miraba fijamente sus orbes castaños.

Boscha: Tienes buen físico, para ser una simple humana. Espero no me defraudes la próxima semana.

Luz: Gr-gracias pero en realidad tengo brazos débiles de nerd... Espera ¿Qué?

La capitana había continuado su camino dejando a una muy confundida Luz en medio del pasillo sin respuestas y con demasiadas preguntas.

Willow: Bueno, eso fue... Interesante.

Luz: ¡Willow! ¿Cu-cuánto escuchaste? O viste...

Willow: Lo suficiente.

Luz: Si quieres que te explique no puedo hacerlo por qué tampoco sé qué acaba de ocurrir.

Willow: Bueno, esperemos que obtengamos respuestas pronto.

Luz: Si...

Willow: Bueno, ¿Nos vamos? Hoy te toca poner casa para la reunión semanal, ¿O es que lo olvidaste?

Luz: Ja ¿Olvidarlo yo? Me ofenderia si no fuera cierto.

Willow: Lo suponía, vamos rápido para preparar las cosas.

Luz: Claro, hoy Eda traía un botín del mundo humano, podré mostrarles más de mi cultura. Y Amity también vendrá, quiero enseñarle a jugar ocho locos.

Willow: Suena divertido, no puedo esperar.

Las dos amigas se fueron rumbo a la casa búho y se podía decir que el viernes por fin había terminado en Hexside.

Las dos amigas llegaron sin contratiempos a la casa búho dónde Gus las estaba esperando, una vez dentro separaron todo tipo de juegos de mesa y golosinas mientras esperaban a su amiga y dar por empezada la tarde de juegos semanal.

Al otro lado de Bonesborough Boscha recién llegaba a su casa o deberíamos decirle mansión debido a que era enorme.

Boscha: ¡Mamá, papá! ¡Ya llegué!

Nadie le respondió excepto del eco.

Boscha: Seguro siguen en el trabajo, llegarán luego.

Fue a buscar algo para comer antes de ir a si alcoba y empezar a hacer sus deberes. En la cocina vio un papel en la refrigeradora sujetado por un escarabajo imantado.

Boscha: Hola Boscha, salimos de viaje de negocios y volveremos en 10 días.- leyó- perfecto, justo lo que necesitaba.

El sarcasmo en su voz era obvio y aunque estaba apenada por no ver a sus padres, en cierta forma agradecía aquello ya que podría llevar a cabo sus peores bromas sin tener que preocuparse por nada.

Boscha: Algo bueno debe salir de estar sola a la fuerza.

No tenía tiempo de lamentarse así que se puso manos a la obra.

Boscha: Éste será un entrenamiento que no olvidarán.
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Nota de autor:

Bueno esta es una historia que se me acaba de ocurrir y no podía quedarme de brazo cruzados sin escribir nada.

Cómo leyeron en la descripción, habrán parejas poco comunes pero son ships que me gustan mucho así que si no les gusta les sugiero que dejen acá su lectura 😅

Fred fuera
Byeeee~

La mascota del equipoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora