ﾒＢＬＡＺＥﾒ -ＢＯＯＫ１

ﾒＢＬＡＺＥﾒ

- Año ####, Ubicación: Musutafu, Japón. Un nuevo día comenzaba para aquel muchacho, tenía que adaptarse a su nueva vida, algo realmente particular, sabiendo de dónde venía, esto aún parecía un sueño; recorriendo la ciudad sin conocer a nadie, llevaba 1 día allí, no sabía el como ni porque había llegado a este lugar, se sorprendió al ver a las personas utilizar sus dones, se preguntaba si el tenía uno... O tal vez también era un quirckless.

Tenía que encontrar la manera de buscar vivienda y trabajo, para un joven de 14 años esto estaba siendo complicado, no conocía a nadie, no sabía nada del lugar donde se encontraba, vagando sin rumbo alguno se acercó a un restaurante, amablemente saludo al mesero. -Este, disculpe señor, me gustaría saber si aquí estaban buscando empleados, realmente necesito trabajar. Con una cara de fastidio absoluto el mesero hizo a un lado a aquel chico, quien solo soltó un suspiro cansado y salió de ese lugar, siguió caminando hasta encontrarse con una playa, diría que hermosa pero estaba realmente llena de basura, al verla soltó una pequeña risa, sabía que sucedería allí, pero mientras tanto, ese sería un buen lugar para vivir, entre tanta basura podría hacerse un pequeño espacio, si, vivir en la basura ¿Pintoresco no?

-Si por mi fuera, limpiaria está playa, pero, ese trabajo no me corresponde a mi, por ahora viviré aquí, por lo menos hasta que eso pase, tendré que buscar un trabajo y ahorrar lo suficiente como para comer y rentar un departamento después, también tengo que terminar la escuela, tsk, que complicado es todo aquí, ni siquiera sé si tengo un don...

Con evidente cansancio se dispuso a pararse de la arena y empezó a construir un pequeño "refugio" que sería su hogar durante un tiempo, esto no era para nada parecido a como estaba acostumbrado a vivir, se sentía cansado, solo, deprimido y triste ¿Cómo es que había llegado aquí? Hace solo un día estaba recostado en su cama y hoy estaba alistándose para comenzar a vivir en una playa; después de un tiempo logro terminar su pequeña "casa" encontró varias cosas que le fueron útiles para su comodidad, hizo un pequeño techo con unas tejas que encontró, habían dos carros realmente dañados sobre los cuales puso las tejas y para tapar a sus espaldas colocó un gran pedazo de metal a sinónimo de pared. "Fiu" suspiro con cansancio, ya era de noche, no había comido nada, tenía que buscar algo, si no comía mañana despertaría peor y sin fuerzas para nada, con pesadez se dirigió hacía otro restaurante, pero esta vez, hacía la parte de atrás, dónde estaban los contenedores de basura, con afán se dispuso a rebuscar entre los contenedores, sabía que habían muchas sobras, realmente nunca se imagino estar en este tipo de situaciones, comiendo de la basura... Se sentía frustrado, después de todo, creemos que todo es tan fácil pero cuando realmente nos encontramos en situaciones complicadas nos damos cuenta que al fin y al cabo somos humanos, tenemos limitaciones y no todo lo podemos hacer.

Y así como lo imagino, encontró comida, sobras, pero al fin y al cabo eran comestibles, con rapidez las mastico y engulló, a decir verdad, le daba un poco de asco saber que estaba comiendo de la basura, dónde había tanta suciedad y desperdicios, pero su hambre era mayor que eso, todo hubiese seguido así de no ser porque escucho un ruido viniendo de la entrada del callejón dónde se encontraba, eran risas, se quedó viendo con curiosidad, al parecer eran estudiantes de secundaria que venían hacia allí, inmediatamente reconoció al de en medio, tenía el cabello rubio pero muy pálido, una mirada afilada, ojos rubí, piel blanca, a leguas se veía que se ejercitaba, "Bakugo...".

Más que miedo, sentía emoción, ya le conocía pero nunca en su vida se le había pasado la posibilidad de verlo, pero no era el momento de entablar conversación con el, si lo viera así podría armar un problema, se escondió detrás de los contenedores hasta que el trío de muchachos se fue de ahí; el muchacho siguió comiendo pero una carcajada lo detuvo "Pero que tenemos aquí, un vagabundo, no me servirá de mucho pero al menos podré camuflarme y desaparecer por un tiempo, dime ¿Cuál es tu don?"  Al escuchar esa voz inmediatamente sintió un miedo terrible, se le olvidaba que allí habían villanos, ya no eran simples ladrones, ahora eran villanos reales, al ver directamente a quien le hablaba se tenso, era el... El villano de lodo, ahora que podía ver todo como realmente era sentía un miedo mayor, la hostilidad que percibía no era normal, ni siquiera pudo intentar hablar, era como si su boca estuviera sellada, tragó saliva y sudor corría por su cara, "Quería ser amable contigo muchacho, mírate, ni siquiera puedes articular palabra alguna jajajaja, realmente tienes miedo, pero no te preocupes, solo dolerá unos segundos..." Poco a poco fue acercándose a él muchacho de ojos y cabello negro.