Capítulo Único

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Alberu Crossman, no parecía tener ningún interés en todas las chicas, e incluso chicos, que se acercaban para darle un regalo por el día de San Valentín. Rosalyn chasqueó la lengua suavemente.

"¿No aceptarás ninguno?"

Al ver a Alberu negar con la cabeza con expresión ausente, se le ocurrió algo más, así que preguntó tentativamente.

"¿Podría ser, que ya tienes a alguien especial?"

Alberu si la miró esta vez, pero simplemente asintió con la cabeza y sacó su teléfono móvil, parecía estar chateando con alguien.

Oh.

Como hija de una familia influyente, Rosalyn había conocido a Alberu Crossman desde que eran unos niños. Ahora, estaban en su último año de preparatoria, nunca supo nada sobre Alberu teniendo un amor secreto.

Rosalyn pensó en quien podría ser la persona especial en el corazón de este pez gordo, pero no pudo llegar a ninguna conclusión.

Tenía curiosidad.

Se levantó de su asiento y avanzó hacia Choi Han, quien tenía el escritorio repleto de chocolates porque era demasiado amable para rechazar, ella le preguntó en voz baja después de arrastrar una silla para sentarse a su lado.

"¿Sabes quién es la persona que tiene el afecto de Alberu-nim?"

Choi Han se puso rígido instantáneamente.

"... ¿Eh? ¿No? ¿Hay alguien así?"

"Lo sabes".

Rosalyn conocía a Choi Han desde hace muchos años, naturalmente, sabía cuándo estaba mintiendo.

La mirada de Choi Han se dirigió a Alberu por un momento, pero Alberu seguía con la vista en la pantalla, entonces suspiró y se inclinó hacia Rosalyn.

"Bueno, sí, hay alguien. Pero es complicado de explicar".

Rosalyn vio a Choi Han fruncir el ceño levemente, dudando, así que preguntó.

"¿Son pareja?"

Choi Han negó.

"No lo son".

"¿Estudia aquí?"

"Recibe sus estudios en casa".

Rosalyn parpadeó un par de veces, asimilando la información.

"¿Cómo se conocieron entonces?"

Choi Han se recostó en su asiento y comió un chocolate de los que estaba en su escritorio antes de responder.

"En la nieve".

Dejando de lado a la confundida Rosalyn, Choi Han guardó los chocolates en su bolso. Debería llevarle algunos a esa persona, eso lo animaría un poco. Estaba seguro que Alberu haría lo mismo.

***

La ciudad se había pintado de blanco con la caída de las primeras nevadas. El aire frío y los tonos grises del cielo indicaban que probablemente nevaría pronto una vez más.

Aun así, la capa de escarcha blanca parecía brillar luminosamente bajo los débiles matices de luz que atravesaban los densos nubarrones.

En medio del manto blanco, más específico, en un parque, debajo de un árbol cuyas hojas habían caído con el otoño, un destello rojo llamaba la atención.

El pequeño niño pelirrojo vestía un grueso abrigo blanco, además de orejeras, bufanda, guantes y botas. Parecía un peluche de felpa.

Los ojos del niño estaban cerrados, parecía estar muy tranquilo con estar sentado en ese lugar.

Photographs to treasure. [TCF]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora