_Narra X_
Camino, como mis piernas me lo permiten, ya que una de ellas aún no "funciona"; ya que pasé toda mi vida en silla de ruedas.
Sigo caminando, pensando en mi padre, en mi madre, en el mundo en general, en mi familia...
Llego a una casa. Camino en cuclillas hasta llegar a la puerta, mato a uno de ellos, el cual está en el suelo, sentado. Entro a la casa, y me encuentro con tres de ellos, colgados del techo, ahorcados, tratando de alcanzarme. Los dejo caer, uno a uno, para que no me maten, porque como hay muchos obstáculos en el suelo, y sólo cuento con un cuchillo... Bueno, no podría ni aunque fuesen dos, o sólo uno. Acabo con todos esos zombies, y camino hacia lo que parece un pasillo, con un adorno de algo parecido a una flor de palos de golf. Obvio, si estaba en club de golf...
Llegué a un bar, completamente destrozado. Pensé que podría ser un buen momento para empezar a beber. Como yo tenía muchos problemas... Creo que era un buen motivo para que una chica de trece años comience a beber a esa edad. La silla de ruedas, mis malditas piernas, mis padres... Nunca volvía a verlos después de ese acciedente de coche.
Tomé un vaso, pero éste estaba lleno de sangre, así que lo dejé. Aunque, pensándolo mejor, no tenía nada que beber...
Busqué debajo del mostrador y encontré un licor de durazno. Tomé una copa y la limpié. Me serví un poco de licor, pero no me atreví a tomarlo. Pensé en lo que diría papá, o mamá... Estarían decepcionados de mí. Me rendí, y bebi el primer trago, luego el segundo, y luego seguí hasta terminar el vaso. Me sentía algo mareada, así que decidí dejar de beber esa porquería que sabía horrible.
Me tiré en el suelo, a descansar, como hacía tanto que no podía.
Escuché un par de ruidos que me hicieron salir de mis pensamientos. Eran.... ¿PERSONAS?
"-Beth, aquí hay alguien" Dijo un hombre, cuya voz me sonó conocida.
Me escondí detrás del mostrador, casi tambaleándome. Tenía miedo de esas personas. Seguramente eran más de dos, y sólo ellos estaban aquí adentro.
Los pasos se acercaban más y más. Estaba segura de que iban a descubrirme ni bien llegasen hasta donde yo estaba. Estaba más que segura de que iba a morir. Mejor. Ya no quería vivir en esa mierda de mundo. Extrañaba a mi mamá... A papá... Al tío Merle... (Que conste que no es esa mierda que se ve en la serie; es buen tipo)
Ya estaban acá, casi al lado mío.
-Hey, quiero tomar un trago de esto. _Dijo una chica con una voz muy dulce_ Hey, ¿Es bueno el licor de durazno?
-No... _Dijo el hombre_
-Iré a buscar un vaso. Espera aquí. _La chica se acercaba. Bueno, al menos era la chica. Aunque yo estaba un poco ebria, si se le puede decir así a una chica de trece años que bebe su primer trago de licor_ Hey. Aquí hay alguien _Dijo la chica. Suspiré de alivio al ver que estaba un poco lejos, pero cuando giré mi cabeza, la chica estaba mirándome fijamente, con sus hermosos ojos azules_ No voy a lastimarte, niña. _Dijo susurrando. Ella también se veía como una niña_
-Hey, ¿Te escondes, Beth? _Dijo el hombre, acercándose_ ¿Beth? _Se acercó. Yo me escondí más al fondo de ese pequeño espacio que tenía el mostrador, que quizá era para cajas, y que no se veía hacia afuera_ ¡Beth! _Casi gritó_
-Vamos. _Negué con la cabeza. Ese hombre no me daba mucha confianza_ Vamos, o se enfadará. _Asentí. No quería verlo enfadado, eso seguro. Parecía muy cabrón. Me incorporé y salí de mi escondite, con las manos en alto_ No está armada. _Dijo la chica, Beth, antes de que el hombre logre decir algo_
-¡Sal ahora! _Me oredenó, y yo sólo obedecí, con la cabeza gacha_ Quiero ver tu rostro. _Ahora que lo veía bien, era un hombre al cual cualquiera podría y debería temer. Estaba vestido con una camisa negra, botas cortas, también negras, y un chaleco de cuero. Lo que más me llamó la atención fue su arma: una ballesta. Bueno, subí la cabeza, y pude ver su rostro también_ ¿Harley? _Dijo el hombre_
-¡Papá! _Exclamé entusiasmada_ ¡Estás vivo! _Dije, corriendo a abrazarlo, esquivando el cuerpo de un hombre obeso y zombificado, pero muerto_ ¡Papá!
-¿Cómo puede ser? _Me tambaleé hasta llegar a él. ¡Esa porquería de alcohol sí que hacía efecto, mierda!_ ¿Estás bien? _Dijo, pero no llegué a responder, porque caí inconsciente_
_Narra Daryl_
-Princesa... ¿Estás bien? _Pregunté a mi hija, a quien acababa de encontrar. Ella abría los ojos, poco a poco_
-¿Qué me pasó? _Dijo, masajeando su cabeza_ ¿Me mordieron?
-¡Dios, no! _Dije, un poco preocupado por mi hija_ No, sólo te desmayaste... _Le dediqué una mirada culpable, seguida por una sonrisa_ ¿Te sentías mal? _Negó con la cabeza_ ¿Entonces?
-No lo sé... _Trató de hacerse la inocente, pero no funcionó conmigol. La miré serio, pero luego le sonreí_ ¿Qué pasa, papá? _Yo sólo negué_ ¿Y mamá? _Yo fruncí los labios, y miré hacia abajo. Sí, estaba llorando. Yo, aunque no lo parezca, lloraba bastante_ ¿Mamá murió?
-Lo siento, princesa... _Comenzó a llorar, mientras tomaba mi mano_ No pude hacer nada... No... No pude... Sólo no pude, hija... Lo siento tanto.
-Papá... Promete que nunca vas a irte. _Dijo, un poco enojada_ Me abandonaste. ¡Yo estaba sola! _Me reclamó, furiosa. Yo sólo me limitaba a negar, llorando amargamente. Traté de abrazarla, pero no me lo permitió_ ¿Ahora estás feliz? ¿Cuando el daño es irreparable? ¿Cuando me abandonaste mientras estaba inconsciente? ¡¿Eh?!
-No, hija... _Respondí triste, y sintiendo una culpa terrible_ No sabía que seguías allí en el auto... Lo siento mucho, princesa... _Tomé su mano, la acerqué a mí, y le dí un beso en la frente. Ella sólo sonrió, triste. Miró a Beth_ Ella es Beth, princesa... Nuestro grupo se dividió, algunos murieron... Yo quedé junto con Beth. Si no la hubiese encontrado, ella probablemente seguiría ahí, convertida, creo que buscando a los niños para subirlos al bus. _Ella rió, junto conmigo, mientras que Beth se recostó en el suelo, llorando. Solté la mano de mi princesa y me acerqué a mi compañera. Ella sólo lloraba, con la cabeza escondida entre sus rodillas_ Creo que no debí decir eso...
-¡No es eso! _La miré, triste. La ayudé a levantarse, y le di un pequeño abrazo_
-Bueno, creo que nos vamos a otro lugar, porque si no, los caminantes nos atraparían.... _Dije, tomando mi ballesta_
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One thousand ten (1010) _The Walking Dead & tú)
FanfictionLas estrellas brillan, el cielo es azul.... Pero no sirven para nada si me faltas tú. (Carl Gimes y Tú)