Jamais Vu; HyunIn ©️AD

noveno idilio

⠀⠀La fría ventisca de la mañana golpeó en su rostro agradablemente, el cielo gris avisando que se avecinaba una tormenta. JeonGin bostezó y se estiró perezoso, aferrándose al cuerpo cálido de HyunJin a su lado mientras parpadeaba repetidas veces, analizando el panorama. 

⠀⠀Se notificó entonces de algo brillando en la mesita de noche, y curioso se elevó un poco para observarlo. Era su teléfono, pensó impresionado. Seguramente HyunJin lo había encontrado y puesto a cargar, ya que él había preferido dejarlo olvidado durante ese tiempo. 

⠀⠀—Bueno... —murmuró para sí mismo, mordiéndose el labio y tomando el teléfono en mano. 

⠀⠀Se removió incómodo, acurrucándose contra HyunJin mientras contemplaba con inseguridad qué debía hacer.   

⠀⠀Pensó en su mejor amiga.  No dudaba que Azula estuviera preocupada por su repentina desaparición, sobre todo desde los últimos mensajes que leyó venir de ella. Lo encendió, sintiendo un desagradable vacío en su interior, mas lo ignoró a sabiendas de que tendría que enfrentarse a ello en algún momento. 

⠀⠀Tras poner la clave, lo primero que lo saludó fue una llamada entrante de un número desconocido. JeonGin entró en pánico cuando HyunJin se removió tras de él, temiendo despertarlo. 

⠀⠀Trató de bajar el volumen, sin embargo, el aparato procedía con lentitud mientras se actualizaba. 

⠀⠀Deshaciéndose del fuerte agarre que los brazos de HyunJin mantenían alrededor de sus caderas, se precipitó hasta el balcón, cerrando la puerta para amortiguar el sonido que rápidamente fue secundado por el de las notificaciones que aparecían como locas. 

⠀⠀Sabía que debía comprarse un nuevo teléfono, pero al ser dependiente de su marido en todos los sentidos, no podía. Tendría que pedirle dinero y no quería enfrentarse a ello, por lo que prefirió conformarse. 

⠀⠀El mensaje de llamada perdida apareció en la pantalla avisándole que no había contestado a tiempo, pero el emisor fue insistente. Dudoso, JeonGin contestó. 

⠀⠀Un error. 

⠀⠀—Nunca había estado más decepcionado de ti en mi vida. —La voz fría de su padre al otro lado del teléfono, fue como un baldazo de agua fría. JeonGin se sintió desubicado. 

⠀⠀—¿Pa... Papá? 

⠀⠀—Director Yang. Veo que el compromiso con tu esposo no es lo único que has decidido olvidar —soltó, mordaz. JeonGin enmudeció y su boca se secó debido a sus palabras. 

⠀⠀—¿Qué? 

⠀⠀—Imagina mi sorpresa cuando cierto periodista se acerca a mí, con una foto de ti cometiendo adulterio y pidiendo una exorbitante suma de dinero a cambio de no revelarla al público. —La calma en su tono era engañosa. JeonGin sintió como el alma abandonaba su cuerpo, un nudo en su garganta acentuándose—. Siempre supe que eras una decepción, pero cada día me lo demuestras más. 

⠀⠀—Director Yang, yo... 

⠀⠀—No necesito tus excusas o lloriqueos baratos. Suficiente he tenido a lo largo de los años —lo cortó—. Me cansé de tu irresponsable actitud, poniendo en juego nuestra reputación como grupo. Viajas el veinte de marzo a Corea, junto con MinHo. Es hora de que dejes de jugar a la casita y te des cuenta de que tu matrimonio no es más que un trato. —Y después, simplemente colgó. 

⠀⠀Durante diez segundos, JeonGin fue incapaz de reaccionar, limitándose a sí mismo a ver la pantalla del teléfono mientras procesaba lo que acababa de pasar. Solo cuando salió de su estupor, se dio cuenta de la gravedad del asunto. 

⠀⠀A su teléfono, llegó un mensaje. Era de MinHo. 

⠀⠀» Regresa a la casa donde estábamos. La dirección es [XX - XX]. Hay una llave debajo de la alfombra de bienvenida. 

⠀⠀Dejando caer el teléfono, suspiró derrotado, apoyándose en la pared posterior a él. Podía ver desde esa posición a través del vidrio que daba a la habitación, el cual le enseñaba una imagen de HyunJin durmiendo tranquilamente. 

⠀⠀¿Qué haría? 

⠀⠀[...] 

⠀⠀Dejar la cafetería con sus pocas pertenencias en mano sin responder los interrogantes de JiSung no fue lo más complicado, sino el estar huyendo del pequeño nidito de amor que había logrado armar con HyunJin en tan poco tiempo, únicamente por presión y miedo. 

⠀⠀Estaba actuando de forma imprudente en ese mismo momento, dejándose llevar por sus emociones, y lo sabía. El problema, era que no tenía idea de cómo detenerse. 

⠀⠀Había pasado un tiempo reflexionando, y finalmente aquella calma inicial había terminado por ser efímera, abandonándolo. Rompió en llanto, desesperado por sentirse atrapado. El peso sobre sus hombros se acentuó repentinamente, insoportable, recordándole que su aventura con HyunJin tenía fecha de vencimiento y tenía que regresar a su vida. 

⠀⠀Una parte de él, la que todavía le tenía miedo a su padre y a no ser suficiente, le decía que lo mejor era regresar y disculparse. Afrontar las consecuencias que seguro le estarían esperando en corea con el mejor rostro. Sin embargo, aquella que había recuperado al lado de HyunJin, le decía que no estaba bien ser tan maleable. 

⠀⠀El vacío y la punzada en su pecho se acrecentaban a cada paso que daba, advirtiéndole de la mala decisión que estaba tomando, pero, ¿qué podía hacer? Estaba entre la espada y la pared. 

⠀⠀Solamente aquella llamada había sido suficiente para reducirlo a esa maraña de confusión. Su reacción a posteriori, le había demostrado que no tenía la fuerza ni el valor para llevarles la contraria.   

⠀⠀No podía dejar la vida que conocía e intentar una nueva con HyunJin. Estaba sujeto a las decisiones de alguien más sobre su vida. Esa era la realidad. 

⠀⠀Y a pesar de no sentirse conforme con lo que le estaban imponiendo, tenía miedo de tirarse al vacío y darse la oportunidad de conocerla. 

⠀⠀Había sido poco tiempo el que estuvo al lado de HyunJin como para considerar algo tan arriesgado. 

⠀⠀Un pájaro que vivió toda su vida en una jaula al ser liberado y tratar de enfrentarse al mundo real terminaba muriendo rápidamente por su inexperiencia. A pesar de que su encierro es cansino, lo mantiene protegido, mientras que la libertad lo expone a un sinfín de peligros y complicaciones. 

⠀⠀JeonGin era exactamente eso: un pájaro que tenía miedo de salir de su jaula, pero que, al mismo tiempo, ansiaba la libertad. 

⠀⠀No había coherencia alguna en sus deseos. Deseaba ser intrépido, y, sin embargo, temía a las consecuencias que eso le podría traer. Pero después de todo era un humano, con sentimientos que no siempre debían tener una justificación coherente. Era frustrante. 

⠀⠀La soledad se burló de sus planes, mientras que su corazón sangraba debido a ellos. Lo había sabido desde antes, que todo iba a acabar. Pero entonces, ¿por qué dolía tanto?   

⠀⠀Con su mente revuelta, miró al cielo gris en busca de respuestas. 

⠀⠀La lluvia mojó su rostro, combinándose con las lágrimas. 

"Tenemos el arte para no morir a causa de la realidad"   

4/6