My Little Slut- L.Hemmings y tu

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Escenas  +18

Sherlyn:

Fue realmente estúpido no seguirle el beso por que segundos después ya me estaba devorando su boca cómo el lo hacía con la mía.
Entramos a mi casa con desesperación, cerré la puerta y me acorraló a la pared y empezó a besarme el cuello lo que hizo soltar un jadeo. Lo alejé un poco y lo llevé a mi habitación, cerré la puerta y cuando menos lo esperé solo estaba en ropa interior al igual que Luke.

–Mierda que buenos senos tienes Sherlyn– dijo Luke besando mi pecho tal vez dejando marcas que se notarán por varios días. Me di la vuelta quedando arriba de el, me quité el sostén dejando mis senos al aire libre al igual que mis bragas.

Poco después toda la ropa había desaparecido dejándonos completamente desnudos. Luke puso un condon y se puso encima de mi

–Si te duele me dices hermosa– dijo y solo asentí, sentí su miembro entrar lo que me hizo gemir, poco a poco fue mas rápido haciendo que la cama rechinara con cada embestida que daba

–Mas... Mas rápido Luke– dije con dificultad gracias a mi respiración agitada

–Como digas preciosa– empezó a dar embestidas más rápidas haciéndome gemir más y arañar su enorme espalda. He tenido sexo varías veces pero ninguna vez me ha hecho sentir tan bien como ahora.

Salió de mi de repente y me volteo dejándome en cuatro, entró en mi con rapidez lo cual me hizo gemir más fuerte, sus embestidas eran rápidas y de alguna manera me hacía sentir muy bien.

–Luke!!– gemí sintiendo sus embestidas más rápidas de lo normal apretando las sábanas

–Si...Gime para mí– sentí su mano chocar con mi trasero que supongo dejó una marca.

Seguimos así por varias horas hasta que sentí que estaba a punto de llegar a mi orgasmo y sentía que Luke también.

–Mierda me voy a correr– dije con la voz entrecortada

-Yo también– dicho eso dió sus embestidas más rápidas haciendo que la cama rechinara con rapidez gracias a las embestidas, sentí mi orgasmo apoderarse de mí cuerpo y poco después sentí la respiración agitada de Luke en mi hombro dando a entender que había llegado a su orgasmo.

–Desde ahora eres mía gatita, No quiero saber que estás con alguien más por que te irá muy mal, entendiste?–dijo en mi oído mientras sentí su mano recorrer mi pierna y trasero

–Si...–dije, me recargue en su pecho y me quedé completamente dormida