Oye, te fuiste cuando más necesitaba amor en tiempos de aflicción. Te fuiste cuando más mi fuego buscaba despertar tu pasión. El "ojo por ojo, diente por diente" no va conmigo, voy de la ruina a la fortuna, y de una caída a una danza candente. Adiós, adiós, le sonrío al pasado y seduzco al que de corazón me traiga la noche bajo un juramento enamorado. Oye, me amas ahora con una conveniencia perfecta, pero te soplo un sensual beso y desde mi alma te digo "no me importa".
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