red flavor ! taegguk

remember.

ya habían pasado unas cuantas semanas desde que taehyung dejó que jeongguk se quedara en su casa. la pequeña hadita se quedaba cuidando de yeontan, la mascota de taehyun, era un perrito pequeño y peludito al cual jeongguk le gustaba acariciar todo el día y jugar con él mientras taehyung trabajaba.

el mayor trabajaba en una tienda de piercings, el deseo de taehyung era ser tatuador profesional así que mientras sacaba su curso de higiene sanitaria estudiaba artes en una de las tantas universidades del país y también trabaja para poder pagar sus deudas, su universidad y obviamente su comida. algo que taehyung descubrió de jungkook es que a la pequeña hadita le encantaba verlo hacer sus proyectos de universidad, también a veces lo veía chusmear entre sus cuadernos de dibujos y podía estar varios minutos viendo sus obras.

— jungkook, ven aquí, pequeño. — habló taehyung, el cual estaba sentado en uno de los sofás individuales de la sala de estar, jungkook se encontraba sentado en el suelo jugando con el pequeño tannie y al escuchar las palabras de "su" taehyung, se levantó inmediatamente para sentarse en el sofá más grande de la sala.

— ¿sí, taehyungie? — respondió jungkook.

— quiero hablar contigo, quiero saber todo sobre ti y sin mentiras, por favor.

jungkook abrió sus ojitos algo nervioso pero aún así asintió, dispuesto a decirle cada mínimo detalle sobre su existencia.

— está bien... — jungkook tomó una honda respiración y habló. — soy un hada, sé hacer magia y posiones variadas pero uhm... sólo puedo alimentarme de sangre de animales y si es posible, sangre humana, he probado hierbas y muchísimos hongos, pero nada funciona. nadie de mi familia sabía por que me ocurría esto y muchísimos me decían raro, algunos me tenían miedo ya que pensaban que los iba a comer, esa es una de las razones por la cual me alejé de mi aldea y familia... y siendo sincero, creo que me siento muchísimo mejor alejado de ellos, me siento libre y feliz. —finalizó dando una tierna sonrisita la cual escondía las pequeñas lagrimitas que estaban amenazando con salir.

taehyung notó como el ambiente cambiaba cada segundo que jungkook soltaba sus palabras, y al ver aquellos hermosos ojitos amenazar con llorar, fyé directo hacia él, abrazándolo con cariño y posesividad.

— de ahora en adelante nadie podrá hacerte daño, bebé ¿sí? y podrás beber toda la sangre que quieras de mi... es más ¿algúna vez has probado comida de humanos?

habló con voz suave para no espantar al meno, este negó con la cabecita mientras lo miraba con aquellos grandes ojitos húmedos por culpa de las lágrimas.

— es tu día de suerte cariño, hoy probarás muchísimas cosas... las prepararé yo mismo para tí, mi hadita.

le dió un besito esquimal juntando ambas naricitas y frotandolas, hasta que tannie, que miraba la escena con celos se interpuso en el espacio que quedaba de los dos, gruñendole suavemente a taehyung para que alejara de jungkook.

— ¡hey, pequeño traicionero!

y ahí comenzó una tierna guerra de cosquillas.

¡capitulo sin editar! si encuentran faltas ortográficas hacermelo saber, por favor.

¡espero disfruten la lectura, pastelitos, los quiero mucho!<3