Una pequeña fiesta

1.3K 42 13
                                    

Lisboa

Habíamos decidido divertirnos lo más que pudiéramos antes de entrar al banco,bueno de que los chicos entrarán al banco y nos metiéramos de cabeza en el atraco,pero claramente Sergio no nos dejaría hacer una fiesta,era tan controlador que no permitiría algo con tal magnitud. Así que decidimos hacerla a escondidas,pero claro que algo era difícil,pues él no dejaba de controlar todo.

Palermo tuvo un...no sé cómo llamarlo "Plan genial", consistía en que yo me encargaría de entretener a Sergio con una de nuestras "Charlas" y ellos organizarían todo,pero claro que yo me sentí mal al utilizarlo de esa manera para después dejarlo dormido,semi desnudo en la cama de nuestra habitación, tumbado boca arriba y con la sábana tapando solamente sus genitales,sus maravilloso genital. La gente no lo cree,pero Sergio es el hombre más sexy e inteligente que nunca había conocido.

-amor,lamento demasiado dejarte en esta condiciones.-dije viéndolo con admiración,estaba semi desnudo y yo quería quedarme,pero quería ir a la pequeña fiesta,tenía meses que no bailaba,bueno no contaré las veces que bailaba en la sala de clases con Sergio,enseñándole que solo debía seguir mi cuerpo. - Te amo.-dije dejando un beso en sus labios y saliendo de la habitación con mucho cuidado.-

Jersey de lana,chaqueta,pantalones y botas,así decidí asistir a esa pequeña fiesta,ya que hacía frío pero no demasiado.

T:Llego la "PROFESORA"!!!!.- grite.-

P:Lisboa,ya has terminado, pensé que tardarías menos,boluda.- dije caminando hasta ella.- Se alargó la charla.-dije con tocó pícaro y ella volteó los ojos.- Queres tequila?.- pregunté sacando la botella que escondía en mi espalda.-

-Venga.- dije quitándosela de las manos y abriéndola.-

B: Salud.-dije alzando la cerveza.-

L:Salud.-respondi a Bogotá alzando la botella para después ser un trago largo.-

D:Que comience la fiesta.-dije y puse la música,todos se acercaron,Tokio estaba preparando un piti,piti que luego recorrería las bocas de todos.-

E:como se entere el profesor de que estamos de fiesta se lía.-dije riendo y dándole un sorbo al tequila.-

H:Profesor molestarse.-dije sonriendo.-

P:Tranquilizate Estocolmo,aquí mi querida Lisboa ya le dio comida a la fiera.-dije riendo.-

Me limité a reír,la verdad no quería entrar en el trapo con Palermo. Después de más o menos una hora,el piti había acabado y comenzábamos con el tercero de la noche y la cuarta botella de tequila,Palermo estaba bailando junto a nosotros,mientras que Helsinki y Bogotá estaban sentados fumando,bebiendo y hablando temas de los cuales mi interés no los acompañaba.

Alguien se aclaró la garganta de tal manera que nos dejó a todos sorprendidos y nerviosos,el ciego de muchos se desapareció en cuanto vieron de quien provenía ese sonido,yo decidí no ponerme nerviosa,contando que tenía un ciego que no podía con el. Sonreí y cogí el piti para darle una calada.

T: Profesor...buenas noches.-dije tapando mi boca para que no me viera reír.-

P:Sergio,amigo mío.-dije sonriendo y el no le quitaba la mirada de encima a Lisboa,que estaba sonriendo mientras soltaba el aire del cigarrillo.

D:Profesor...esto no es...lo que parece.-dije nervioso.-

S:Lo que parece es una fiesta clandestina.- dije serio desviando a la fuerza mi mirada de Raquel,para ver a Denver.-

D:Bueno entonces si es...es lo que parece.-dije nervioso.-

Sergio volvió su mirada hacia mí chocando con la mia,le di una pequeña sonrisa y volví a aspirar el humo del piti. Se acercó a mí a paso seguro hasta quedar a centímetros de mi.

La Casa De Papel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora