Capitulo 1

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Era una hermosa mañana, un lunes donde todos los niños iban a sus escuelas y los adultos a su trabajos. Pero para Xichen era el mismísimo infierno, estaba llegando tarde a su trabajo y no era recomendable ya que su odioso jefe es demasiado estricto y malhumorado cuando algo no sale como quiere, tres faltas y estas fuera de la empresa.

Se encontraba corriendo con todas sus fuerzas hacia la tienda donde su jefe lo mandaba a comprar su café favorito, pero al llegar al lugar estaba repleto de personas, esa tienda siempre estaba vacía, pero justo hoy la gente quería joder a aquel pobre hombre. Pero como si el mundo tuviera pena una chica de cabello castaño lo llamo con dos vasos en sus manos que reconocería fácilmente, se saltó la enorme fila y le dio una sonrisa de agradecimiento.

— Acabas de salvar mi pellejo MiamMian 

En otro lado Jiang Cheng caminaba con toda tranquilidad, su traje siempre bien acomodado haciéndolo ver joven y atractivo, si no fuera por su siempre ceño fruncido atraería mucho mas miradas

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En otro lado Jiang Cheng caminaba con toda tranquilidad, su traje siempre bien acomodado haciéndolo ver joven y atractivo, si no fuera por su siempre ceño fruncido atraería mucho mas miradas.

Caminando tal elegante saco su teléfono y decidió hacer una llamada.

— Hola Yan Ling Dao Ren mi escritor favorito — dijo cuando su llamada fue contestada— Pero claro que lo has pensado bien, por que es la verdad... Yan Ling la gente esta ocupada, quebrada y odia leer necesita a alguien en quien confías diga "Oye no veas las telenovelas, lee un libro el libro de  Yan Ling" y esa persona es Bao Shan San Ren —

 Yan Ling la gente esta ocupada, quebrada y odia leer necesita a alguien en quien confías diga "Oye no veas las telenovelas, lee un libro el libro de  Yan Ling" y esa persona es Bao Shan San Ren —

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Xichen  seguí con su carrera contra el tiempo, rezaba y rezaba para que su jefe no llegara antes y lo mandara al carajo. Pasaron unos minutos más llegando a la editorial, subió en el elevador llegando al último piso, al parecer su jefe aún no había llegado y eso le dio un poco más de calma, pero era demasiado bueno para ser cierto...

Choco con un chico de mensajería el cual lo hizo derramar uno de los cafés. 

—¿Que- —Xichen pudo sentir como todo su ser hervía de enojo— ¿Que hiciste? —

—Lo siento —dijo aquel chico mientras salia de ahí lo mas rápido posible.

— Ni como ayudarte amigo —Ese fue el comentario de Xichen escucho entre los murmullos y risas de sus colegas.

LA PROPUESTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora