Imagina, si fueras un chico malo, de esos que son fríos y calculadores, que nunca se van a tentar el corazón al ver como suplicas. Uno violento y sin escrupulos, impulsivo y protector, lleno de rabia y odio a este mundo que se a encanrgado de demostrarte que no vales nada. Con un carácter del diablo, difícil de tolerar, con un gran ego y arrogancía juntanda con el egocéntrismo. Despreocupado de la vida, pero con grandes demonios en tu cabeza carcomiendote día a día.
Por tantas riñas, por tu forma única de pelear y tus grandes y fuertes movimientos, por esa despiadada sed de muerte y esa mirada salvaje y misteriosa junto con tu sigilo te han dado o mejor dicho, te has ganado el apodo de:
Pantera.
¿Puedes darte una idea?
Ahora, imagina que "accidentalmente" conoces a una chica, pura como el agua, un rayo de luz, tú rayo de luz siendo ella la única que puede amar a tus demonios y amarte ati mismo. Haciendola una necesidad constante para ti, haciendo menos las llamas de tu infierno y curando tus quemaduras.
Entonces, ¿Puedes imaginarte como es ella?
Dulce y amante de todo en este mundo, con una forma muy particular de ver todo y a todos, pero sobre todo... De verte ati... Tolerante ante todo y siempre con esa chispa de alegria que contagia a todo aquel que la mire, con suaves modos y, para ti con un corazón de oro. Con esa voz pasible que le da tranquilidad a tu corazón de piedra, dandote una sensacion de quererla proteger por lo pequeña y delicada que es.
Comvirtiendose en:
Una dulce tentacion.
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Dulces tentaciones. (no soy Romeo ni tú Julieta)
RomanceDulces tentaciones. (No soy Romeo y ni tú Julieta) -creí que me amabas...-repuso la muchacha con la cabeza baja. El dolor en sus ojos del chico era evidente, pero era tanta su cobardía que nisiquiera le miraba. -creér es para los debiles.-dijo despu...