capitulo 6

17 5 11
                                    

Me desperté temprano y Susan me trajo el desayuno a la cama, le escribí a Rena para saber cómo estaba y que después me cuente cómo le fue con Luca

Después de desayunar, ordene mí habitación

A la hora del almuerzo vinieron mis amigas a cenar como habíamos acordado ayer, comimos lasaña que había hecho Susan

No sé quedaron mucho ya que la mayoría tenía cosas que hacer en la tarde o noche

Las acompañe a la puerta y nos despedimos, estos días que me quedaban no pensaba salir, amaba salir si, pero a veces las personas necesitamos un momento para nosotros mismos, sin nadie más

Me encerré en habitación a terminar de leer el libro que estaba leyendo

Una vez lei una frase que decía los libros son mi escape, mi utopía más real que he sentido, fragmentos de mi ser, la causa de mis ojeras y mis risas en la madrugada. No puedo estar más de acuerdo son eso y mucho más

Una vez que termine el libro agarre mí celular y vi un mensaje de Renata que decía, llámame

No lo pensé dos veces antes de llemarla, me atendió enseguida

—Hola, que paso— dije enseguida

—Hable con Luca—

—Y que dijo—

—Que el se iba a ser cargo porque me amaba y era su responsabilidad— lloro — son lágrimas de alegría lo juro— y se rió

—Creo que las hormonas ya están actuando— y nos reímos las dos

—Ahora toca decirle a mis papás y a los de el—

—Como crees q reaccionen?—

—No se, espero que bien—

—Vamos a confiar que van a reaccionar bien— le dije mientras caminaba por la habitación, cada vez que hablaba por teléfono no podía estar quieta

—Vos cómo estás?—pregunto cambiando de tema

—Ahora estoy bien— y no era mentira pero tampoco era verdad, pero no sabía hablar de lo que sentía, era algo que me constaba mucho

—Ive, te conozco, cómo estás—

—Esta bien, extraño a mamá, pero no vuelvo hasta una semana, pero estoy feliz porque papá va a tener otro hijo con Carla y con lo de Den, no se, me dolió, me lo podía esperar de cualquiera menos de el, era mí amiga y lo quería—

—Tu mamá siempre es igual Ive, ya va a volver, no minimizó tu problema pero no sé que decir, y con lo de tu papá, felicidades—

—Si está bien entiendo, y gracias— dijo más aliviada por decir lo que me pasaba

—Y con lo de Den, las personas a veces no son como esperamos, a veces nos idealizamos tanto a una persona, que pensamos que va a decir o hacer las cosas de cierta manera y resulta que no, lo mejor es alejarlo de tu vida Ive—

Tenía razón, generalmente las personas idealizamos a ciertas personas y como duele cuándo esa persona hace o dice algo que en nuestra idealización no haría, nunca terminamos de conocer a alguien esa es la verdad

—Gracias Rena, tenés razón—

Pasamos unas dos horas hablando por llamada de diferentes cosas hasta que cortamos

Ya eran las siete de la tarde y tenía un mensaje de Adriel sobre si hacíamos algo, le dije que no porque quería tiempo para mí

Llene la bañera y me di un baño de espuma estuve un rato largo en la bañera, cuando salí sentí un dolor en los ovarios, eso significa que ya estaba por venirme la menstruación

Le pedí a Susan si me hacia un té de manzanilla y me lo tomé mientras miraba una película.

No sé qué hora eran cuándo me quedé dormida y al día siguiente me levanté tarde, estaba aprovechando a descansar ya que hace mucho no tenía tiempo para mí

Pase los siguientes días leyendo, escuchando música, durmiendo y comiendo.

El domingo por la noche volví a prender el celular y no había ningún mensaje de mis amigos, si había de otras personas pero bueno, mis amigos sabían que me iba a romper esos días para mí, era obvio que no me iban a mandar mensajes.

Busque a Sam y le dije que mañana me pasará a buscar, era la última semana de clases, así que iba a ser puntual o lo iba a intentar.

Al otro día me desperté tarde, mierda chau plan de llegar puntual al colegio, me puse el uniforme, me maquillé un poco y baje a toda velocidad la escalera

—Menos mal querías llegar temprano toda la semana— dijo Sam ríendo

—Bueno si, me retiró de intentar llegar puntual, no es lo mío claramente—

—Si no me lo decías no me daba cuenta Ive—

—Sam mejor vamos porque ya estamos tarde— dije riendo

Los siguientes días no hice mucho, estaba en finales así que no salí de mí casa, mamá me dijo que al final llegaba dentro de dos semanas más, así que el sábado para celebrar que habíamos terminado el año hice una fiesta en mí casa invite a todo el colegio, claramente solo venía la mitad pero mí casa era grande y mí patio también, así que podía meter toda esa gente.

Priscila, Diana, Thali, Sara, Aylen, Renata, Sam, luz y hethel vinieron a prepararse a casa así que nos ayudamos entre todas a elegir que ponernos y maquillarnos

Me puse unas unas vans porque eran más cómodas para bailar, una mini negro y un top plateado que deja toda la espalda descubierta, me puse un labial rojo mate, me deline y me puse brillitos debajo de los ojos.

Vino Adriel, Daniel y Mateo mí mejor amigo de toda la vida dos horas antes de la fiesta, al parecer Sam y Daniel estaba saliendo no eran novios pero se estaban conociendo.

Mateo me saludo de un abrazo que me levanto del piso y yo le reí mientras lo abrazaba

—Como está la mujer más hermosa de todas— pregunto

—Por suerte re bien ahora que ya termine el colegio, vos como estás?—dije feliz

—Mejor— dijo con una sonrisa triste

La verdad era que le habían dicho que si abuela podía fallecer pronto, en la semana solo me junte con el, porque quería que sepa que contaba conmigo para lo que sea, no dijo más así que lo abrace fuerte y le dije que lo amaba.

Cuando nos separamos Adriel nos miraba desde el sillón donde todos se habían sentado fijamente, solo le sonreí

Fui a la cocina a buscar latas de cerveza para todos, cuando llegue vi que Adriel me había seguido

—A mí no me vas a saludar— pregunto levantando una ceja

—Sabes que no— dije sonriendo de espaldas

Sentí su mano en la cintura y me dio vuelta

—Que maleducada, hay que enseñarte modales— pregunta con una sonrisa de lado

—Depende de que forma—

—Vamos arriba y te muestro—

—Despues de la fiesta— le dije

—Mmm está bien—

con su mano todavía en la cintura acerco nuestras bocas hasta poder darnos un beso

Cuando volvimos a la sala de estar estaban todos conversando, deje las cervezas en la mesita que había hay y me senté al lado de Adriel.

Así pasamos las dos horas que quedaban para la fiesta, hablando y riendo entre amigos.

A mí parecer no hay nada más lindo, que reírse con gente que uno quiere, es un mimo al alma.

Una historia diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora