DIRTY | HAN JISUNG.

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Flashback

El humo estaba acabándose y las ganas de consumir más nicotina aumentaban entre su sistema.

Revisó el bolsillo de su camiseta y no habían más cigarrillos del cual poder fumar. Gruñó soltando una maldición pero su estado de ánimo había hecho un giro al ver como tenía esa bandeja en sus manos quitándose el delantal bajando aquellas escaleras.

Sonrió al recortar lo que había pasado aquella noche, por la manera en la que se había expresado con ella, por aquel momento que jamás olvidaría en su miserable y aburrida vida.

Quería llamarla o enviarle un mensaje pero sentía miedo en que ella se sintiera apretada con el, quería darle espacio pero al hacerlo sabía que ella pensaría que ella no le interesaba.

Lamió sus labios tratando de ir al lugar de siempre, sabía que la menor tenía esperanzas de que Han la iba a encontrar ahí, sonrió al tomar el gran picaporte de la puerta abriéndola así lentamente.

Sintió algo cubrir su vista y la puerta se había cerrado repentinamente.

— Está ocupado, puedes ir al lado —Escuchó como su voz avisaba de que estaba ahí. Maldijo por lo bajo tantas veces por no entrar a tiempo pero al menos sabía que no le iban a hacer daño. ¿O si?

— ¡Que mier...! —Sintió un golpe en su nuca empezando a cerrar los ojos, y a pesar de que sabía en que situación se encontraba sabía que no saldría vivo de esta.

No dejaba de pensar en ella, aunque estuviera inconsciente la imagen de su rostro no dejaba de aparecer, quería al menos avisarle de que el aún seguía con las ganas de verla en todos los sentido posible.

El estrés que había sentido al escuchar su voz y no poder decirle que era el había entrado desde que sintió que se había desmayo. Estaba agradecido por una parte por no entrar a tiempo, ellos tal vez sabían que lo estaba esperando una chica pero no sabían que la menor era su chica.

Estaba aliviado por eso pero no le quitaba el pensamiento de que se atreverían a hacerle daño. Debía hacer creer a la gente que ella no le estaba dando interés y que ella no le interesa para nada, así ____ estaría a salvo.

Sintió un balde de agua fría empapar su rostro despertándolo en cuanto sintió el agua fría correr por su cuello. Aquella persona le quitó la bolsa que estaba en su cabeza y al ver su rostro su corazón se había enfriado.

— Hasta que por fin te encontré hijo de puta —Esa sonrisa tan aterradora, su voz una escalofriante daban ganas de morirse en ese momento.

Pensó en las cosas que le haría en ese instante al darse cuenta de los miles de dólares que le Han había quitado. Estaba jodido.

— Tantos meses buscándote y aquí estás —Han sonrió haciendo que la ira de aquel hombre aumentara aún más —Buscarte en tu casa no fue una buena idea.

— Alguien estuvo aquí.

— ¿Que? —Cuestionó Changbin.

— Las cajas están destruidas, estaban buscando algo y los hijos de puta no lo pudieron encontrar.

— Buscaban mercancía —Habló Chan —¿En serio pensaron que la teníamos aquí? Que patéticos.

— Que hijo de puta —Exclamó en un tono agudo arrugando su cara lleno de asco entendiendo el por qué su vieja cada estaba destruída.

El rió.

— ¿Pensaste que iba a dejar pasar que me hayas robado más de treinta mil dólares Han? Estás muy equivocado.