Inhalo y exhalo tanto como las cuerdas alrededor de mi pecho me lo permiten. Intento tranquilizar mis nervios, sin embargo, un nuevo berrinche me hace rechistar en la silla a la que estoy atada.
—¿Podrías, por favor, calmarte? —pide el chico sentado a mi espalda, igualmente atado a su silla— ¡Me lastimas cada que te mueves!
—¿¡Y cómo quieres que me calme!? —estallo en un grito gangoso y desesperado— ¿¡Por qué estás tan tranquilo!?
—Tengo experiencia con esto. —responde, casi lo puedo ver encogerse de hombros y sonreír, si no fuera por las vendas en mis ojos, lo comprobaría.
—¿Cómo pude mezclarme con un delincuente?
—Yo te dije aléjate, pero claro, la niña quería subirse a la moto del desconocido que estaba huyendo.
Quisiera llorar, seguir gritando en busca de ayuda de nada sirve.
¿Por qué tiene que pasarme esto a mí?
...
Empezamos fuerte. 😂😂
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Un chico y otros desastres
Teen Fiction"Pueden pasar más cosas en 12 horas con un fugitivo, que en años con una pareja." ... Charlie y Club Luna Azul parecían uno solo: cada sábado en la noche, ella aparecía sin falta para robarse las miradas cada que subía a la pista de baile con sus se...