One Shots 《Personajes Literarios》

《 Ares Hidalgo 》🔥

Esa mañana,cuando se despertó,desorientada,en una habitación que definitivamente no era suya,con un terrible dolor de cabeza,desnuda y con una brazo rodeando su cintura,supo que seguramente había hecho una estupidez,pero al girarse y encontrarse con un rostro que no conocía mucho pero que había visto varias veces,se dio cuenta que esto iba a causar un problema en el futuro. Por más que quisiera pensar que simplemente se iba a quedar así,como una noche de mucho descontrol,alcohol y sexo,sabía que eso iba a tener consecuencias.

Y cuando le llegaron las imágenes de todo lo que había pasado esa noche. Específicamente de lo que había hecho con él,supo que eso no sería fácil de olvidar,al menos para ella.

Por más que trató de tomar el control de la situación cuando él se despertó,igual sabía que no sería así de fácil todo. Pero no hizo caso a sus pensamientos y hablo con él,aclararon las cosas. Le dijo que eso se iba a quedar ahí,que no se iba a repetir y que iban a hacer como si no hubiera pasado nada.

Como si ambos no hubieran tenido la mejor noche de sus vidas.

Después de eso,ambos salieron como si nada de esa habitación,volvieron a sus vidas,pero ninguno de los dos olvidó realmente lo que pasó en esa habitación,las imágenes de lo que había pasado entre ellos seguía rondando en sus mentes,torturándolos. Haciendo que él tratará de sacar esas imágenes de su cabeza acostándose con cualquier par de piernas que se le cruzara. Y que ella se enfocara mucho más en sus estudios,ahogándose en libros para poder recuperar el control de sus pensamientos.

Pero era obvio que a ninguno le funcionó. Y eso se hacia ver en ese momento.

Él fue el primero en caer. No aguantaba más la absurda necesidad de volver a estar dentro de ella,de tenerla a su merced,de volver a escuchar de esos apetecibles labios,como ella gritaba su nombre,rogándole por más,mucho mas.

Por eso es que apenas ella le abrió la puerta sólo le hecho un vistazo a su vestimenta,unos shorts demasiado cortos para la poca cordura que le quedaba,y una remera que le quedaba un poco suelta y que dejaba ver que ella no llevaba sujetador y definitivamente eso fue lo que lo termino de enloquecer.

Asi que,cediendo a los deseos que lo atormentaron durante más de dos semanas,en un rápido movimiento la agarró de la nuca y la besó.

La besó con todo lo que se había guardado durante esas semanas,con toda esa necesidad que sentía por ella,por volver a sentirla,la besó con toda la desesperación que contenía.

Y aunque ella al principio dudo, dejó que él tomará su boca con desesperación,sin seguirle el beso,hasta que con un poco de renuncia se apartó,sólo unos centímetros de su boca y él reacio cedió a ella y se separó,pero aún sediento de más,dejo que ella decidiera como seguir.

Pero cuando ella vio la intensidad que los ojos de Ares reflejaban,junto con todas esas emociones,todo el deseo,lujuria,desesperación y necesidad que emanaba,también cayó. Cayó porque aunque se lo estuvo negando todas esas semanas que los recuerdos de lo que pasó llegaban a su mente,en ese momento,al ver la desesperación y necesidad que él también demostraba tener,cedió,porque ella también lo anhelaba.

Entonces sin más,lo agarró con firmeza de ambas mejilla y lo volvió a besar,está vez con toda la desesperación y necesidad que también sentía.

Ambos cayeron,se besaron,como tanto habían anhelado todo ese tiempo. Él la tomó de los muslos e hizo que ella enredara sus piernas alrededor de su cintura,como imagino incontables veces en la oscuridad de su habitación mientras sin poder evitarlo su mano bajaba hacia su miembro y se acariciaba lentamente.

Todo fue tan intenso como esa noche. La pasión,la necesidad y la desesperación con la que se basaban era igual e incluso más que aquella noche en la que ambos estaban pasados de tragos.