Por qué? -dije a la nada con lágrimas en los ojos preguntandome que hice para que me pasará esto
q-que hice..? f-fue mi error? -con la voz entrecortada caí de rodillas ante tal ecena, por qué me pasaba esto a mi?
Me levanté y salí corriendo con lág...
Me encontraba entrenando en el bosque, mis avances son mejores y estoy cerca de lograr hacer la décima postura del aliento carmesí.
aahh... que cansancio -di un suspiro pesado llevo aquí dos horas, levante la cabeza hacia el cielo observando como este se encontraba llenos de nubes grises
Parece que va a llover... Creo que dejaré el entrenamiento para después -empeze a caminar en dirrección a casa, pero el ruido de una rama interrumpio mi caminata.
Quien está ahí?! -grite con mi "katana" en mano, no me servirá de mucho ya que es de madera, pero prefiero esto a no tener nada.
Me dirigi a paso lento hacia el arbustos dónde escuché el ruido, espero que no sea un demonio.
Sosteniendo mi "katana" de madera aparte el arbustos de a poco.
Eh? Un... Zorro? -es muy pequeño, está temblando y tiene muchas heridas, parece que está inconsciente¿
pobre... Yo te ayudare -dije con una sonrisa estaba a punto de cargarlo pero otra vez un ruido me interrumpio.
Me levanté rápidamente ya que estaba arrodillada, con la "katana" de madera en mano di un paso adelante, pero lo que estaba ahí se me adelantó mostrando tres lobos grades uno negro y los otros dos grises, mire sus grarras y dientes que estaban llenas de sangre, supongo que no suyas
Más? -me di cuenta que estaban mirando al pequeño zorro que estaba a mis pies, valla entonces ellos lo atacaron.
Eh?! No! Larguense déjenlo en paz! -grite moviendo mi "katana" de madera de un lado a otro mientras me hacercaba para intentar espantarlos, lo cual funciono
Hmph! -me dirigi hacia el pequeño zorro para tratarlo, tiene heridas muy grandes y graves, tome una vendas de mi mini-bolso dónde tenía algunas pocas herramientas para sanar heridas, sentí una gota caer en mi mejilla.
Demonios... Se puso a llover -dije y al instante paso lo dicho.
tengo que buscar algún lugar para refugiarnos, la casa aún está muy lejos -me levanté y tome al zorro metiendolo a mi ahori para que no se moje.
Empeze a correr en dirrección a una pequeña cueva que ví cuando paseaba, a lo lejos pude ver la cueva, aumente la velocidad ya me estoy mojando bastante.
Llegué a la cueva, ya por dentro me doy cuenta que es un lugar lindo, perfecto para pasar el rato.
Oh, casi se me olvida -saque al zorro de mi ahori y empeze a curarlo, el sonido de la lluvia y la hermosa vista de la cueva al menos para mí, me tranquilisaba y relajaba.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Termine de vendar al zorrito que sigue inconsciente.
aahh, ojalá esta lluvia no dure mucho, tengo hambre -dije recordando los deliciosos platillsos de fukuda-sensei
