OO

871 63 9
                                    


Jungwon adora coleccionar muñecos.

Aquellos por alguna razón le transmitían un sentimiento artístico, un brillo una chispa que lo hacía querer coleccionar más.

Sim embargo aquella misma obsesión por querer tenerlos todos hizo que perdiera el interés en eso, al ver su colección se sentía orgulloso, pero, no era aquel sentimiento, aquella chispa artística de belleza que le transmitían antes, así que se da la idea de buscar alguna o algún muñeco que le regrese aquella vibra que andaba buscando.

Pará aquello, tenía que ser un muñeco de porcelana, uno con una piel brillante, que su piel fuese clara pero a la vez morena, su pelo oscuro como la noche misma, y que al verlo se iluminaba como el sol.

Después de su ardua búsqueda, encontró su objetivo, aquello que con tan sólo verlo le trasmitió belleza, dulzura, y perfección, que regresó su chispa y regresó sus sentimientos hacia el arte, sin embargo, también lo hizo sentir algo que JungWon nunca había experimentado, amor.

JungWon necesitaba coleccionarlo y tenerlo, tenerlo solo para el, en su casa y guardado sin que nadie pudiese deleitarse por su belleza, que solo el pudiera admirar sus rasgos que no lo pudieran tocar ni manipular nada ni nadie, nade más que el, solo que había un problema el cual lo impedía.

Y es que aquello que lo deleitó y que tenia todo lo que necesitaba para vivir, no era un muñeco, era una persona real.



Aclaraciones!

I. Esta historia fue creada con fines de entretenimiento, abarcando temas sensibles.

Si este tipo de contenido no es de tu agrado puedes retirarte en silencio.

II. Contenido [ ! ] obsesión, maltrato, terror psicológico [ ? ]

III. Historia con adaptación autorizada, créditos a la historia original @ivoctte

──𝗣𝗼𝗿𝗰𝗲𝗹𝗮𝗶𝗻 𝗱𝗼𝗹𝗹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora