Caos

240 22 10
                                    

No supieron cuánto tiempo estuvieron escuchando gritos, disparos y objetos romperse a lo lejos , ni cuando Harry empezó a darle a instrucciones para respirar a Dylan. No fueron consientes de cuando fuerte se sostenían hasta que se soltaron y sus extremidades dolieron. Todo el susto le quitó a Harry cualquier rastro de borrachera y cuando el sol salió estaba tan sobrio como cuando despertó el día anterior.
Se moría de hambre y tenía muchas ganas de hacer pis, pero no sabían si podían o no salir.
El timbre del celular los sobresalto a ambos
- ¿ Dyl, estás bien, encontraste a Harry? - la voz de su tío llegó como una oleada de tranquilidad, estaba vivo y si él lo estaba los demás también
- sí, estamos bien, bien sí - no era capaz de organizar bien las ideas - ¿Podemos salir?
- si, vuelvan a la mansión, los esperaré en la entrada de la cocina del servicio.

Miro a Harry, se veía destrozado y de seguro el mismo no lucía mucho mejor, lo ayudo a ponerse en pie, volvieron a sentir temor una vez fuera del refugio, se tomaron las manos y corrieron manteniéndose alerta, a medida que se acercaron a la casa el caos fue evidente, habían sillas, botellas, casquillos y sangre por todo el lugar, pronto vieron a Sebàstian en la entrada y corrieron con más fuerza, se estrellaron en un abrazo lloroso y confuso con él. Sebàstian se sintió un poco más completo, por unas horas los pensó perdidos también, los hizo entrar a la casa, iba detrás de ellos con el arma cargada y alerta, una vez en la biblioteca y dentro del pasadizo se permitió abrazarlos como necesitaba.
Cuando la puerta de la oficina se abrió no vieron a quienes esperaban ver, Emma corrió a los brazos de su gemelo
Con el miedo cerrandole la garganta, Harry logró preguntar: "-¿ y los demás?- allí dentro solo estaban Emma, la familia Adams y Cristopher, no había rastro de ningún otro Black ni de los padres de Dylan y Emma.
- se los llevaron - Sebástian tomo una respiración profunda contarle a sus amigos había sido una cosa pero contárselo a su hijo, a su hijo menor con el que tenía una relación tan difícil era algo completamente diferente
- ¿fueron personas involucradas en la mafia? - el alma, literalmente, se le salió del cuerpo.
Las luces de la oficina parpadearon en tono rojo, acto seguido Sebástian volvió a tomar el arma con fuerza "alguien ha irrumpido dentro de la casa" se puso frente al monitor y logró manipular las cámaras hasta dar con el intruso, era un solo hombre encapuchado, le pidió a Zack que lo guiará por medio de una llamada telefónica, el entraría a ciegas a la casa, se ajusto los airpods y trato de mantener la cabeza fría, si lograba capturarlo podría obtener algo de información, sentía su sudor correr frío por la espalda, caminaba con todo el sigilo que podía "está en el comedor principal" la voz de Zack lo sobresaltó, Sebastián entro a una de las salas contiguas del comedor -"va a salir por tu izquierda-" se preparó para interceptarlo, rezaba al cielo por qué su habilidad para luchar no estuviera tan oxidada después de tanto. Vio la punta del arma asomarse en el marco y no espero más, le dió un golpe con su propia arma haciendo que la del intruso volará.
- quieto- lo amenazó mientras sin quitarle los ojos de encima iba a por el arma.
El hombre se lanzó sobre Sebastián cuando esté se agachó a tomarla, ambos cayeron al suelo, Sebastián tuvo una fracción de segundo para lanzar lejos una de las armas, el hombre lo golpeó en el rostro repetidas veces, Sebàstian logró darle un cabezazo y desestabilizarlo lo suficiente para virar en su propio eje y hacerlo caer, Sebàstian logró ponerse en pie algo mareado, el intruso golpeó las rodillas de Sebastián tirándolo de nuevo al suelo haciendo que se golpeara la cabeza en la caída, la parte trasera de su cráneo empezó a sangrar desmesuradamente, el encapuchado lo pateó en el costado, entre el dolor, las náuseas y el mareo lo último que vio fue el cabello rojo de Dylan Cárter aparecer.
Dylan redujo al intruso en solo dos movimientos,el hombre fue amordazado y llevado a una pequeña habitación de servicio por Cristopher y Dylan; mientras Zack y su hijo Jake cargaron a Sebástian hasta la oficina donde lo esperaban Cárter y Emma listas para atender sus heridas, por suerte Emma tomo un curso de atención a la salud y Cárter era veterinaria y bióloga marina por lo que tenía ciertos conocimientos que podía aplicar a un humano .
Harry vio a su padre entrar inconsciente, solo quería correr a los brazos de su madre y llorar mientras ella le decía que solo había ido una pesadilla, que todo estaría bien, pero no podía, ella no estaba ahí y no lo estaría a menos de que lograran algo. Con los pulmones lleno de oxigeno y temor se acercó al rincón donde tenían al intruso
- ¿Qué hacias aquí? - le repetía una y otra vez Christofer al hombre y este se negaba rotundamente a hablar - Dylan - llamó y este le propino un golpe al intruso que lo hizo escupir sangre - no volveré a preguntar ¿qué demonios buscabas aquí? Y mas vale que respondas o mi rojo karateca va a practicar todos sus movimientos contigo
- Solo cumplo ordenes - logro balbucear - debia llevármelo a usted - el silencio se tragó la habitación, ¿habia venido por Christofer, por qué?
- ¿Ordenes de quien? - cuestiono Dylan
- No lo sé - Dylan le aplico una llave al cuello - Franco De villeros, es lo último que diré
- Afuera todo el mundo, lo hare hablar y si no colabora, lo mataré
Harry había estado perdido en medio del interrogatorio, asustado por todo lo que estaba viendo, de un lado sus tíos intentaban ayudar a su padre, por otro casi toda su familia estaba desaparecida con quien sabe cuantas personas mas y justo frente a sus ojos, asesinarían a un hombre
- Déjenlo ir, por favor - Harry se interpuso entre los muchachos y el intruso, ambos lo miraban de diferente manera, aunque en el fondo de sus ojos había el mismo reflejo
- No podemos hacer eso, cielo, necesitamos que hable - el tono suave con el que le hablo Christofer casi lo hace sentir bien, pero luego este lo aparto y se dirigió serio al tipo - y lo hará si quiere seguir con vida - los ojos del diseñador volvieron con ternura a él y lo vio lloriqueando - ¡No somos matones! - le dio un empujón y salió de la oficina, Dylan decidió seguirlo, al fin y al cabo, era quien más lo conocía.
Harry sentía las pisadas de Dylan siguiéndolo de cerca y cuando este intentó tocarle se apartó, su corazón seguía latiendo demasiado rápido, al llegar al final del pasillo, justo antes de entrar al estudio, Harry se volteo hacia Dylan
- Lo golpeaste, mírate, estas lleno de sangre, de su sangre - Harry se abrazó a sí mismo y salió del pasillo iría a su habitación no importaba que.
- Él iba a matar a tu padre, Hazz, merecía cada uno de los golpes que le di - Harry no se detuvo, siguió su camino a la habitación, Dylan empezó a desesperarse, por alguna razón sebástian los había llevado al estudio y no a sus habitaciones. Lo tomó del brazo, frenándolo. Harry se sacudió con fuerza soltando el agarre de Dylan.
- Tú ibas a matarlo - dijo entre dientes
- Nunca te haría daño, Hazz, lo sabes. Soy yo, Dylan, el de siempre, esto es un caos, estamos en una situación horrible, y tenemos que actuar de cierta manera. Realmente no lo haríamos, no lo matariamos o por lo menos no yo. Te estoy protegiendo, a ti, a tu familia y a la mía. Déjame hacerlo, yo perdí hoy a mis padres, lo necesito, los necesito de vuelta.
Harry se relajó, era cierto, él no era el único que había perdido algo, estaba actuando como lo que era: un niño asustado; Llorando y quejándose mientras los otros intentaban conseguir algo por mínimo que fuera. Y ellos a diferencia de él, no eran Black, pero estaban llevando mejor el apellido en ese momento.

.
.

Con amor, Levi
¿De donde me leen?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 05, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

HEREDEROS DEL PODERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora