Joker v.s. Merodeadores

Los gemelos encanto (quinto)

Nami corría por la estación desesperada, porque llegaba tarde. Su tardanza se debía a estar peleandose con su hermano. No las encontraba, en cuanto las viera las haría quedar en vergüenza ajena por no esperarla. Ya tenía su venganza preparada. Siguió corriendo sin prestar atención y se chocó contra algo.

-Potter, me cago en tus...-cuando alzó la mirada unos ojos azules, muy distintos a los del color avellana del susodicho, le devolvieron la mirada.-eh...Hola.

-Hola, ¿estas bien?-preguntó el chico, azabache.

-Si.

-¿Tu eres Nami, de las Joker, verdad? Yo soy Adam.

-¿Cómo me conoces? Si ni siquiera te he visto.

-Hay mucha gente que habla sobre vosotras y vuestras bromas. También he escuchado a tres chicos insultandoos.

-Sí, suele pasar.-dijo Nami riendose de la extrañeza de él.

Nami escuchó como alguien gritaba el nombre del chico. Se giró y vio a su clon maligno correr hacia ellos.

-Tu clon maligno te esta buscando.-dijo la chica señalando a la persona que corría a sus espaldas, un chico indentico a él.

-El tuyo también.-dijo él, tras mirar detrás de ella.

-Nah, yo soy la clon maligna.-respondió ella con una sonrisa.

-¡Que casualidad! ¡Yo también!-comentó entre risas.

Alex corría, pero de un segundo a otro se paro en seco en el centro de la estación, comenzó a sonrojarse de un rojo tan fuerte como el pelo de su prima, Nami creyó por un momento que estaba mirando a su gemelo maligno,pero al girarse y mirar en la misma dirección que su prima notó que estaba mirando al clon "Anti-maligno". Acto seguido Alex giro 180 grados y se preparó para salir corriendo, pero ya era demasiado tarde, una sombra sospechosamente roja la arrastraba del lugar de donde quería huir.

-¡Sueltame!-gritó Alex con la cara escondida entre sus manos.

-¿Vas a ponerte roja cada vez que veamos a un tío bueno?

-¡Si! Puede...¡Yo que se! ¡Dejame!

Nami dejó de mirar a su prima, para poder mirar a su destino, entonces estallaron en risas al que los gemelos y las primas estaban en la misma posición, como si fuese un espejo.

-Él es mi hermano Evan.

-Ella es mi prima Alex.

-Sabemos hablar aunque no os lo creais.-dijeron al unísono.

-¡Pero se puede saber-! Hostia...los gemelos encanto.-gritó Ary que llegaba corriendo desde la otra punta de la estación.