¿Jugamos?

Prefacio

Nunca olvidaré lo que leí, el mensaje, aunque yo sabía que no sentía nada, no sé leerlo de esa manera me dolió, pero no lloraría, intentaría olvidarlo a toda costa ¡Esto me pasa por estar leyendo cosas que me dijeron que no leyera! Y aparte de eso por albergar sentimientos, por esto mismo no quería sentir nada por él, los sentimientos son la debilidad de las personas, pero, ese mensaje que él me dio como respuesta, me confundió.

"Se de lo que soy capaz y se que no es algo que tú te merecerias ¿Okey ? No es que no quiera intentar ¿Vale ?"

Quería decirle que no me importaba, que fuese el defecto que tuviese si lo quería intentar que lo intentamos juntos, pero después recordé que me dijo muchas veces que solo me quiere como amiga entonces ¿Qué es lo que quiere intentar? Pero claro, soy tan estúpida que le contesté como mi cerebro me pidió que le respondiera.

"No quiero decirte lo que quiero porque no quiero seguir con este tema."

Y me volví lo que él quería, una amiga, no más "amor" no más "mío" más nada.

Pero cometí un error para mí misma y me sentía tan mal que le dije lo que hice ¿Por qué debía decirle yo sí me metí con alguien? Pero claro de pendeja voy y se lo digo a la primera. En fin me sentí mejor al decirle así que me sirvió... Pero creo que mejor dejo todo así, me dejo de ilusionar como estúpida y ya.

Pero claro la vida hizo lo que le dio la gana y ahí en una plaza (no se quién me dijo que era buena idea pasar mis vacaciones navideñas en su país) lo ví.

¡Dios! Me dio un ataque ahí mismo, quería correr, pero mis piernas no funcionaron.

¡No, no! ¡NO! Sé que si lo veo mis ganas por dejar todo como está se van a ir por el caño y lo voy a tratar de los mil amores como si nada estuviera pasando.

Al parecer por fin mis piernas respondieron y empecé a irme de ahí caminando a un paso rápido pero sin llamar la atención para que no pudiera verme y saber que yo estaba ahí (nunca le dije que vendría, se supone que sería una sorpresa para el día de Navidad).

Estoy casi llegando a mi calle, le pedí el favor a una amiga para quedarme en su casa y quedaba cerca de la plaza en donde estaba, sentí unos pasos detrás de mí, me asusté creyendo que era conmigo, mi corazón palpitó como loco y voltee.

Por fin respiré, no era él, lo reconocería, así que seguí mi caminar hasta la casa de Karen. Recordando todo lo que pasó ayer, no puedo creer que mientras otro me besaba pensaba en Alex es inaudito.

Me encuentro doblando la esquina ya casi llego a la casa, de seguro veremos una película y mañana lloraremos mucho (será 05 de Diciembre, Pushi), quisiera que Cit e Itzel también vengan.

—¿Estás huyendo de mí Barbie?

¡Oh oh!

Carraspeó un poco para cambiar mi vos, aprovechando que tenía unos lentes (me encantan perdón) me los puse y me volteo hacia él.

—¿Disculpe? Debe estar equivocado, no conozco a ninguna Barbie.

—No te hagas Ella–un escalofrío me recorrió–reconocería tu cuerpo a kilómetros de distancia, es mi obsesión lo sabes–voy a morir con este hombre–y aunque tapes esos ojos que adoro tus labios son inconfundibles, ahora yo lo que quiero saber es ¿Por qué me huyes?

—¿Por qué piensas que estaba huyendo de tí?

—Amor–Dios mío, olvidaba lo mal que me ponía este hombre–te conozco, sé que me estás mintiendo, me viste lo sé y no entiendo por qué no me dijiste en primer lugar que estabas aquí, hubiésemos hecho algo, además me vez en la plaza y huyes ¿Qué pasa?

Bien supongo que debía hablar seriamente con él, pero soy tan estúpida que preferí hacer lo siguiente.

—Cállate de una puta vez, joder.–y lo besé, necesitaba hacerlo y besarlo, Dios creo que fue la mejor decisión que tomé desde que llegué aquí.