yo si te puedo ver...

Satanás y un nuevo demonio

No puedo ver bien, algo tapa mis ojos, ¿Qué paso?, intento moverme pero tampoco puedo hacerlo, empiezo a forcejear pero aun así, tampoco puedo mover mis piernas. Mi respiración empezó a incrementar, ¿Qué esta pasando?, ¿Dónde estoy?

- Ya despertaste- se escucha una vos frente a mi, cerré los ojos al sentir que la tela se apretaba y rozaba mis ojos, baje la cabeza y trate de regularizar mi respiración, ¿Quién es?, no podía hablar, parece que mi garganta volvió a la normalidad.

- Gato...-fue lo único que dije o al menos intente...tragaba varias veces, para que si, me iban a torturar o hacerme hablar, lo haga bien y no entrecortado. Ojala hubiera un pote de miel y una cuchara para hacer lo que la señora Müller.

- Quítenle la venda- su vos era demandante, fría y podía sentir que era calculador, me quitaron la venda pero seguía con mis ojos cerrados y con la cabeza agachada- mírame- negué con la cabeza- ¿no quieres ver al demonio? -los abrí de golpe y mire al frente, era el mismo hombre del estanque...entonces estoy en el infierno. Lo ignore y empecé a mirar para todos lado buscando a gato con la mirada, cuando lo encontré no pude evitar sonreír al ver que estaba intacto.

- Señor, Seth, esta en su habitación, dice que quiere hablar con usted lo antes posible- no los escuche mucho, solo veía a gato, mire el suelo y vi que estaba incida y con cadenas en mis brazos detrás de mi espalda y en mis piernas, me eche para atrás y me pare, las cadenas son muy pesadas, pero me puedo mantener un poco de pie, intente acercarme a gato pero las cadenas no me lo permitían

- ¿Qué debería hacer contigo humana?, golpeaste hasta al borde de la muerte a mi mano derecha- miraba el alma de gato, no le paso nada...eso es bueno.

- disculpe por hacer eso Satanás, pero se lo merecía- me pare del suelo y lo mire fijamente a los ojos- el se metió con mi familia, lo hiso sufrir, se lo merecía...puede hacerme lo que sea, pero no me arrepiento de haberlo echo- digo lo mas sincera posible, el me agarra del brazo y su mano se torna de color rojo por el fuego que intentaba usar en mi, pero por alguna razón no me afectaba.

- ¿no me tienes miedo? -dijo con una sonrisa siniestra- ¿tu momento de valentía se termino?, por que necesito darte un castigo, por golpear a un demonio de clase alta y por transformar las almas oscuras en almas de luz- quito su mano frustrado, mire mi muñeca y estaba azul, eso es nuevo...

- ¿mi castigo? -digo ignorando lo que había dicho antes- pues, no se, tal ves una advertencia con un par de golpes o no se talvez que me corten en ciertas partes del cuerpo, luego me dejan en mi casa y tema terminado, ¿no te parece? -digo molesta mientras agarro con fuerza mi brazo donde estaba a punto de hacerse los símbolos.

- Que tierna- dijo sarcástico, se dirigió hacia gato y me tense- sabes, este hombre me a estado tocando las pelotas hace mucho tiempo...-me miro- ¿Por qué no mejor me dices por que tienes esos símbolos en tus manos?, no queremos que este chico se lastime mas ¿o si? -aprete los labios y mordí mi labio de la frustración.

- ¿al menos me podrías soltar? -dije molesta, chasqueo sus dedos y las cadenas desaparecieron en un humo negro- gracias- dije mientras me sentaba en el piso de piernas cruzadas y miraba atentamente sus movimientos.

- Te lo hare mas fácil- volvió a chasquear los dedos y aparecimos en una habitación diferente era como de la época colonial pero eso no hacia que perdiera su toque de elegante y un poco tenebroso, por así decirlo

- Wow...-dije un poco sorprendida, pero se me fue de inmediato cuando una fuerza descomunal me hizo caer en la cama boca arriba y con lo brazos a ambos lados, sin poder moverlos- suéltame- dije forcejeando, pero no podía.