Mi Pequeño Liam (Piam) (Saga: "Little, Lover, Sweet)

PARTE 1 - Capítulo 1

-Vamos Peter, si lo haces te prometo que te compraré el regalo que tu quieras para navidad- dice Talia, mientras intenta a como dé lugar convencer a su hermano menor.

-¿Que no tienes otros hermanos a los que atormentar?- se quejó el joven Peter Hale, mientras armaba un rompecabezas.

-Sabes muy bien, que nuestros demás hermanos andan en sus cosas- contestó Talia.

-Pídeselo a Laura- Peter no iba a aceptar por nada del mundo.

-Laura estará en una pijamada, y Derek cuidará de Cora- añadió, al ver que su hermano iba a hablar- Por favor Peter, solo serán unas dos horas.-

-No- 

-¿Que sucede?- una mujer de cabello negro corto, y de ojos azules, apareció en el marco de la puerta del cuarto, de su hijo menor.

-Mamá, Talia esta molestándome- se quejó Peter, levantándose y corriendo a abrazar a su madre.

-Talia, ¿por qué molestas a mi príncipe?- preguntó Sussane, con una sonrisa, mientras Peter seguía abrazado a su cintura.

-Solo le estoy pidiendo que haga de niñera por dos horas, pero el terco no quiere hacerlo- se quejó la mujer.

-No quiero ser la niñera de un niño majadero, para eso ya tengo suficiente con Derek- volvió a quejarse el jovencito- Mamá, dile, dile.-

-Yo creo que es buena idea, así ganarías un poco de dinero, y no andarías de vago en la casa- dijo la madre de ambos.

-¿Ves? Mama esta de acuerdo conmigo- dijo Talia con una sonrisa ganadora- Y Liam, es un buen niño, muy tranquilo, no es majadero. Te puedo asegurar que no te dará ningún problema.-

Peter miro a su hermana, y luego a su madre, quién le sonreía con cariño.

"Que injusto, me ataca con esa cara, sabe que no puedo negarme a lo que ella pida", pensó mientras veía a su madre.

-Bien, pero es la ultima vez Talia- le dijo.

-Gracias hermanito- la mujer beso la mejilla del menor, y salio corriendo de su cuarto.

-La detesto- gruño Peter por lo bajo.

Sussane dejo salir una risa disimulada y salio del cuarto de su hijo. Peter se sentó en su cama, al final, había cedido, porque su hermana le daba pena, tener hijos tan joven, la habían echo madurar con rapidez, y ella también necesitaba salir a divertirse.

-¿Ahora seras niñera?- preguntó un pequeño de cabello negro y ojos verdes, que estaba apoyado en la puerta.

-Derek, mi paciencia tiene un limite, y lo estás rebasando- le dijo Peter a su sobrino, el segundo hijo de su hermana.

-Derek, ¿estas molestando a Peter?- un hombre alto y de contextura musculosa, aunque no tanta, apareció detrás del menor.

-No papi- dijo el pequeño, para luego salir corriendo.

-Robert, uno de estos días, voy a matar a tu hijo- amenazó Peter mirándolo con enojo.

-Disculpalo, sabes que no lo hace con mala intención- dijo el hombre con pena- Oye, me dijo Talia que aceptaste cuidar al pequeño Liam-

-Si, solo porque me dio pena- dijo volteando a mirar cualquier cosa, menos a su cuñado.

-Gracias- dijo el hombre, y en las mejillas de Peter apareció un pequeño rubor, que no paso desapercibido para el mayor.- Bueno, no se si los Dunbar te pagaran, así que...-

Delante de Peter, apareció un billete de 100 dolares, miro a su cuñado quien sonreía. Frunciendo el ceño, tomo el billete, y luego a empujones, botó a Robert de su cuarto.