Si tus "te quiero" dicen adiós pues los despediré con un te quiero y un beso en la mejilla, tal vez tus te quiero fueron lo único real en ti, lo único con el valor suficiente de no mentir, despedirse sin fingir, sin lágrimas para luego a escondidas comenzar a reír.
Te quiero, pero... ya no quiero que me quieras, ya nos dimos el adiós, tú con ganas de escapar y yo con las intenciones de perseguirte.
Seamos sinceros nadie ama más de una vez porque a la segunda solo buscaremos respuestas que irán atadas a las preguntas del primer amor.
El amor no se comparte, no se comparte el corazón, tampoco se venden ilusiones que terminan rompiendo al comprador.