Festival de 1973 | Capítulo Piloto

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Hoy Win se fue temprano a casa, en unos días tendremos que separarnos por un tiempo, ya que el debe ir a trabajar como tutor en un pueblo alejado, mientras que yo debo ir a visitar a mi familia por el nuevo año.

Tengo todo eso en mente, y por lo mismo, quiero pasar más tiempo con Win; el problema es que casi siempre, por no decir todo el tiempo, está ocupado.

En pasadas relaciones, normalmente el que no tenía tiempo era yo, pero ahora que últimamente el trabajo pesado lo están haciendo Gulf y Mew, tengo más tiempo del normal, y si no tengo nada que hacer, sólo puedo pensar la imagen de Win, cuando camina, su masculino perfil, y ver como se vuelve más apuesto cuando sonríe, la imagen vivida que se ve reflejada en mi memoria, la de hace unos días, en la que Win baila de forma seductora, en medio de la noche, su esbelta figura, y su sutil cintura, él pasaba las manos recorriendo, de arriba a abajo suavemente, la camiseta blanca un poco desgastada hacía notar la forma de su cuerpo... la canción que lo acompañaba sin dudas era simplemente perfecta "Turn me on" de Norah Jones, cantaba con una voz baja y gruesa una de sus canciones favoritas; el movimiento de sus caderas y la brisa de la noche, lo suficientemente fuerte y a su vez delicada, despeinaba su cabello, su sonrisa discreta y su mirada que me tentaba a dejar de lado nuestra conversación, y sólo besar esos suaves y rosados labios.

Si no fuera por el, tal vez no hubiera conocido lo que es la tentación, el deseo de quedarme sólo con el, y olvidar lo demás. Solo tenerlo a mi lado por la mañana, susurrando dulces palabras en mi oído y luego dejar suaves besos. Rodear su cintura y esconder mi rostro en su cuello mientras trabaja; dibujar en su espalda en vez de papel, y jugar con su cabello en vez de un lapicero.

Cuando pienso así sobre él, me dan ganas de poder decirle a todos lo mucho que lo amo... que me dejen amarlo en la forma más bonita en la que puedo pensar amar, gritarle al mundo que no me impida hacer lo "Incorrecto", que no me imponga lo "correcto" y sobre todo gritarle al mundo que amarlo a él,  no me convierte en una mala persona y mucho menos hace que mis sentimientos valgan menos. Como si estos fueran trigo que no floreció como debía, y debe ser llevado y olvidado con el viento, para que después terminen enterrados y enfermos.

Aquí quiero escribir sobre lo que no puedo decir, lo que me da miedo pensar, y lo que me hace feliz recordar. No se si algún día Win vaya a leer esto, espero que no lo haga, ya que de ser así podría morir de vergüenza por los próximos veinte años de mi vida.

Hace unos días, fuimos a comprar cosas para la cena, pasábamos por uno de los campos vacíos, ya que por ahí no suelen venir muchas personas, es aquí donde podemos tomarnos de las manos por un largo rato, hasta llegar a casa, podríamos decir que es lo contrario a un atajo. Pero ese día, el lugar estaba concurrido, muchas personas rodeando un lugar específico del campo, decidimos acercarnos para ver que sucedía.  Un pobre hombre demacrado, casi irreconocible yacía tirado en el piso, atado de manos y piernas, semidesnudo, sus brazos y torso, estaban llenos de rasguños, moretones y heridas abiertas; la imagen generó impacto directo, nadie lo ayudaba y todos se limitaban a mirarlo sufrir, mientras suplicaba que lo mataran, incluso algunas personas lo escupían y pateaban maldiciéndolo; diciendo cosas como "que se joda" o "que arda en el infierno por desobedecer a Dios".

No resistí más, y decidí preguntar que sucedía, una pequeña niña que no pasaba de los 12 años, me miró con lágrimas en los ojos, tomando fuertemente una placa de metal "¿Pueden ayudar a mi hermano? él no hizo nada malo, sólo abrazó a su amigo" dijo, tratando de no llorar más fuerte. Entonces lo comprendí, fue latigado por salir con alguien del mismo sexo.., levanté mi rostro y vi a Win, el sólo permanecía mirando la escena, sin decir nada o hacer algún gesto.

Regresando a casa, ninguno decía nada, mostrándome pusilánime, por lo mismo no sabía que decirle, y se que fue muy egoísta de mi parte pensar que sólo a mi me preocupaba el hecho de que los dos somos chicos, y que tal vez lo que hacíamos estaba mal, pensar que el era la fuente de mis problemas, pensar que si nunca nos hubiéramos conocido todo sería distinto, y no tendríamos que sufrir de esta forma, sofocándonos y viviendo con miedo. 

Todo lo que dije lo lastimó, esa noche después de tanto tiempo haberlo visto siendo fuerte, tanto que lo hacía parecer como si pudiera cargar con el mundo en sus hombros, el detuvo sus pisadas, aunque desde atrás sólo podía ver su espalda, lo vi quebrarse, escuché sus sollozos, y como su voz ahogada trataba de responderme, se dio la vuelta y vi como sus lágrimas recorrían el contorno de su rostro. Después de mis fuertes palabras, aún si le dijera que lo odio, el seguiría sonriéndome de esa forma.

Al verlo ser así, no pude seguir de pie, mis piernas perdieron su fuerza habitual, y el peso de mi cuerpo causo que cayera al suelo, lo único en lo que podía pensar era la mirada de Win, vacía. Y sus preguntas "¿desearías no haberme conocido?" el lo aprobaba, "está bien" dijo, esperando que me levantara para que pueda continuar "¿sabes que es lo más preciado para un maestro como yo?" Esa fue su pregunta, su voz sonaba vibrante, la sonrisa que me dio, no me gusto... no era la habitual. "Lo más preciado, es la persona que me hizo entender el significado de amar a alguien más allá de las etiquetas" 

Mi corazón había sido golpeado, mis ojos podrían haber formados túneles por haber llorado tanto, y me odié a mi mismo por haber lastimado a la persona que más amo. Mis labios sólo pudieron pronunciar frágiles palabras en forma de disculpas, lo último que quería era separarme de él, aún si eso implicaba tener que enfrentar al mundo. En ese momento mirando su carita sonrojada por el líquido tibio que permanecía brotando de sus ojos, tomé su rostro y traté de limpiar sus lágrimas besándolas una por una, aparté sus brazos y junté mi cuerpo al suyo, presionando mis brazos con fuerza, y así evitar que Win huya, ya que él trataba de empujarme, no usaba toda su fuerza, eso me daba la certeza de que quería que lo abrazara y no lo soltara. Esa noche me prometí que lo protegería, no importa de que, si la sociedad iba a criticarnos que sólo me hiera a mi, y si por eso debíamos ser martirizados, que de igual forma sea sólo yo la persona que deba estar tirada sin alma en aquel campo sin luces; si por el contrario, el que obtiene el castigo es Win, se que no sería lo suficientemente fuerte como para vivir sin estar él a mi lado.

La noche ya había acabado y ahora una efímera madrugada se alzaba,  la densa oscuridad poco a poco despareció por completo, dando paso al alba mostrando a todos los individuos que pasaban por ahí, que dos personas del mismo sexo también podían abrazarse.






Decidí hacer un capítulo piloto de esta historia, la escribí hace un tiempo, pero no sabía como desarrollarla o si estuviera bien para los demás. Entonces aquí está :D que tal? esta es un historia de época distinta a las que escribí anteriormente, y no sé que salga de esto. Pero si les gusta este "resumen", entonces puedo publicar la historia completa.

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⏰ Última actualización: Dec 09, 2021 ⏰

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