El ente inmortal

~Capitulo 1~

{Narración normal}

Aquel 19 de diciembre...Aquel día que marcaría la vida de aquel niño peli verde que sonreía felizmente mientras sostenía la mano de su madre.

Izuku e Inko Midoriya caminaban a través del centro comercial el cual estaba decorado con un brillante y hermoso decorado navideño.

El niño estaba sumamente alegre, pues las fechas lo animaban mucho, sin duda estaba  feliz.

Inko: Y dime Izuku, ¿Que deseas que te trajeran esta Navidad?

Izuku: Mmm –pensando en un posible regalo– que tal figuras de All Might? –dijo con alegría–

Inko: Esta bien, suena muy buen regalo Izu –respondió mientras acariciaba la cabeza del pequeño–

El joven y su madre siguieron con su apacible paseo por aquel centro comercial.

¿Nada saldría mal en estas fechas cierto?...

Una explosión se hizo oír en aquel lugar, fue algo muy sorpresivo para el pequeño peli verde, de repente sintió como su madre lo cargó y corrió a un lugar donde su hijo pudiese estar seguro, todo estaba pasando demasiado rápido para el.

Sin embargo una figura encapuchada se puso en medio del camino de aquella mujer 

?: Buenas tarde señora, podría venir conmigo –dijo con educación y burla al mismo tiempo–

Inko: Que hará con nosotros? –pregunto asustada y protegiendo a su hijo con sus brazos–

?: Nada malo, sólo será un rehén. Ahora sigame –respondio el criminal mientras la mano del criminal se transformaba  en un cañon–

La mujer sólo obedeció asustada. Tras unos 20 minutos de caminata llegaron a una especie de almacén oscuro llena de personas temerosas de morir.

Un hombre vestido con un atuendo militarizado apareció junto a dos hombres armados con armas de asalto.

Jefe de los villanos: Hola damas y caballeros, soy Mr. Second y oficialmente estoy tomando control de este centro comercial. Sean tan amables de seder sus celulares o cualquier otra cosa que pueda hacer contacto con la ley.

Todos los rehenes temerosos dieron sus celulares esperando que eso les diese algo más de tiempo para vivir.

[Dos días después]

Las horas parecían eternas para aquellas personas que hace 48 horas carecían de libertad, entre el llanto de los niños reprimidos, la desesperación de las mujeres y la frustración de los hombres ¿dónde estaban las autoridades o los héroes? No lo sabían y eso los aterraba.

Izuku: Mami, ¿estaremos bien?

Inko consiente de la situación y sabiendo que su pequeño necesitaba algún consuelo, así que sonrió con todo el amor de su corazón y le dijo a su hijo

Inko: Claro mi niño estaremos bien 

Fue lo que dijo la mujer a su pequeño para que se tranquilizarse en aquella situación tan terrible y que un niño a duras penas podría analizar.

[Varios días después]

Mr second: Bueno damas, niños y caballeros como no han cumplido mis exigencias por lo tanto empezaré a asesinarlos a todos ustedes. Por cada hora que pase uno de ustedes morirá ¿Quedo claro?

Eso alertó a todos en aquel frío almacén sin duda algunos sentían que Dios los había abandonado, otros sentían que esas serían sus últimas horas de vida, y un pequeño grupo de personas mantenían la poca esperanza que les quedaba.