Sia... [Libro #1] [Saga bebé] +18✔

Capítulo XVI: Beginning of chaos. (Part II)

Sia;

Como si la confesión de Elijah no hubiera sido suficiente para que mi noche fuera más larga de lo que había sido, ahora tengo que lidiar con la presencia de un James Sanromán evidentemente enfurecido; a pesar de la sonrisa que tiene en el rostro, tengo claro que está enojado: Que las venas de su cuello sean más visibles de lo habitual, es una prueba fehaciente de ello. Relamo mis labios y dejo escapar un largo suspiro.

—¿Me vas a dejar pasar a la mansión de mi propio hermano o debes pedirle permiso primero? —cuestiona con ironía y frunzo el ceño. No sé el motivo por el que está aquí, tampoco cómo se enteró de que yo me encontraba aquí.

—Puedes pasar, no soy nadie para prohibirte la entrada a la casa de tu hermano. —respondo con el mismo tono que él había utilizado antes. James entra, ojeando todo el lugar en el proceso. ¿Qué voy a hacer? No razón por la qué él pueda llegar a la conclusión de que entre su hermano y yo está ocurriendo algo; más al pensar que estoy esperando dos bebés suyos. ¿En qué cabeza podría realizarse la teoría de que la supuesta futura madre de tus hijos tendría una aventura con tu hermano?
Meneo la cabeza para apartar esas ideas que han sonado horribles y si en mi cabeza suenan así, fuera de ella y en la boca de los demás debe ser…

—¿Puedes explicarme qué demonios haces en este lugar? —musita y comienzo a ponerme nerviosa. ¡Dios mí! ¡¿Qué se supone que debo hacer?! Intento calmarme para sonar lo más convincente posible, porque, aunque tengo muy claro que soy la peor de las mujeres al no decirle que no es el padre de los mellizos y no conforme con eso, sentir lo que siento por su hermano.

—Es mi jefe y estamos trabajando en un proyecto importante, ambos pensamos que sería más cómodo que me quedara aquí. —le miento sintiéndome más miserable. ¿Cómo demonios me voy a mirar al espejo después de hoy? Hasta este momento, cada vez que Elijah y yo estábamos juntos, la culpabilidad nunca apareció; sin embargo, ahora…

—¿También es parte del trabajo acompañarte a comprar ropa he ir demasiado pegados? —masculla después de traquear el cuello. ¿Cómo él supo eso? ¿Acaso estaba desde antes en Los Ángeles y ni yo ni Elijah nos dimos cuenta? ¿De qué forma podríamos notarlo? ¡Maldición! Espero que no, no quiero que se entere así, no quiero que lo sepa de una forma tan… ¿Dolorosa? Aunque si lo pienso bien, no hay forma en la que pueda disminuir el dolor que él sentirá cuando todo lo que no he dicho sea revelado.

—No conozco el lugar, Elijah se ofreció a llevarme a una buena boutique. —vuelvo a mentir. No lo culpo si nunca llega a perdonarme por esto, porque yo no me creo capaz de perdonarme yo misma.

—¡Qué considerado resultó ser mi hermano mayor! Dime, ¿también te ayudó escoger la maldita ropa interior? —cuestiona y abro los ojos exageradamente e intento buscar en mi cabeza una buena forma de que deje de pensar lo que es. Al parecer mi silencio alteró más a James, y decidió demostrármelo.

—¡¿Te estás follando a mi jodido hermano?! —brama con enojo, zarandeándome en el proceso, aunque me está lastimando, no soy capaz de decir nada. Estoy completamente paralizada, la vista se me empaña y siendo un nudo en la garganta.

—James… —más que decir su nombre, aquello fue un susurro patético y cargado de miedo, y no miedo de que se enterara de que sus sospechas son ciertas, sino que me hiciera daño.

—¿Y qué si así fuera, hermanito? ¿Te golpea el ego que Sia sí tenga buen gusto? —Escucho hablar a Elijah, este tiene la mandíbula apretada y los brazos detrás de la espalda.

—¡Te juro que si le llegaste a tocar un pelo, te mato! —espeta James soltándome de forma brusca, caigo al suelo y es en ese precioso momento en el que soy consciente de lo estúpida que fui. ¿Cómo puede permitirme hacer y sentir tanto por Elijah Sanromán sabiendo que era hermano de James? Aunque cuando concebimos a los mellizos, yo no tenía idea de lo quién era; todas esas veces en las que me entregué a la pasión, sí era consciente de ello.