Sia... [Libro #1] [Saga bebé] +18✔

Capítulo XXII: Revelations (Part I)

Sia;

Me muevo por la habitación con nerviosismo, a pesar de que Penny me pide que me tranquilice no consigo hacerlo. ¿Cómo puede pedirme que me calme cuando la ex novia de mi actual novio está muy embarazada de él? Me siento en la cama cuando me fatigo un poco, el bebé está muy inquieto y decido calmarme por su bienestar. Solo espero que esto no cambie lo que hemos construido Elijah y yo en este corto periodo de tiempo.

—Él te quiere mucho, Sia, estoy segura de que esa niña tendrá a un padre amoroso y preocupado; pero solo eso. —asegura Penny, intentando calmarme. "Él me quiere" es ahí donde radica el problema, yo ya no lo quiero, esa palabra ya no abarca todo lo que siento por él y me aterra que no sea tan recíproco como asegura.

Dejo escapar un suspiro al sentir mi teléfono sonar, maldigo por lo bajo cuando veo que se encuentra al otro extremo de la habitación. ¡Genial, pequeño Sanromán! Tú y tu mansión me están volviendo una perezosa de los mil demonios. Penny ríe un poco y me alcanza el teléfono, frunzo el ceño al ver que se trata de mi papá, puesto que ya habíamos hablado en la mañana.

—Hola, papá, ¿ha ocurrido algo? —pregunto con nerviosismo. Un suspiro de su parte, más un sollozo de parte de mi madre, me hacen pensar lo peor; mis ojos se cristalizan y niego frenéticamente al no estar preparada para lo que supongo ha ocurrido.

—¡Siena ha despertado! —grita un eufórico Christopher White, y sonrío a más no poder. La situación con Cristal ha pasado a segundo plano con la alegría que me recorre el cuerpo al escuchar aquellas palabras.

—Estaré mañana a primera hora en New York. —les informo y ante mis palabras, Penny frunce el ceño. Hablaría primero con el doctor, pero espero que en el jet privado de Elijah y con mucho cuidado, me permita hacer el viaje.

Salgo de mi recámara con la intensión de contarle a Elijah que mi hermana ha despertado, y aunque no me gustaría interrumpir la plática que debe estar llevándose a cabo en su despacho, no veo otro remedio. Camino como torturga hasta el despacho de Elijah y me detengo antes de entrar, ya que he escuchado algo que...

—No tengo ninguna obligación contigo, ¿por qué tendría que esconderle a la madre del hermano de mi hija que te acostaste con ella sabiendo que era Sia White, la novia de tu hermano? Y que te la seguiste follando solo por vengarte de tu hermano, tan simple como eso, hacer sufrir a tu hermano porque en el pasado él te hirió a ti. —comenta Cristal entre risas, risas que se escucho lejanas. ¿Una venganza? ¿Todo fue una maldita venganza? Niego frenéticamente y termino entrando en el despacho.

—¡¿Qué tú qué...?! —grito con todo el dolor que estoy sintiendo en este momento. A pesar de que sé que he escuchado perfectamente bien, no consigo parar de negar, mucho menos retener las lágrimas que bajan por mis mejillas y me nublan la visión. Elijah me observa con temor, temor que no es para menos.

—Mi amor...

—¡No me digas mi amor! —vuelvo a gritarle, camino en su dirección evidentemente furiosa.

—Déjame explicarte. —me pide y vuelvo a negar, me limpio las lágrimas de las mejillas sin delicadeza alguna. El bebé no ha parado de moverse, ¿cómo demonios cambia tanto de posición? Ayer estaba debajo de mi costilla, ahora lo siento en la parte baja de mi abdomen; seguramente será un jugador de fútbol profesional muy intranquilo.

—Dime que no es verdad, Elijah, por favor, dime que tú no planeaste esto por favor. Dime que tú no me conocías y que me propusiste seguir conmigo después de saber quién era porque te gustaba mucho y no podías resistirte como yo. ¡Dímelo! —exijo y cuando intenta tocarme me niego a que lo haga.