Este banco esta ocupado, por un abuelo y por sus nietos.
Abuelo, antes de empezar quiero que sepas que aún no me he olvidado de ti. Que aún te escribo cada vez que necesito ayuda. Que la casa de abuela esta vacía sin ti desde hace ya unos años.
No te pude decir todo lo querría decirte en estos momentos, nunca tuve la oportunidad de agradecerte ser un ejemplo para todos nosotros y un luchador nato que murió sabiendo que lo había intentado y lo había dado todo por los suyos.
Puede que no fuera la más obediente, que las liara siempre y que no pudiera estarme quieta un segundo. Pero abuelo, en el fondo no sabes lo muchísimo que me importabas. No pude disfrutar mucho de ti ya que la maldita enfermedad fue avanzando con los años.
Abuelo, todos estamos muy bien, hemos crecido,como es normal, y se podría decir que hemos madurado aunque sea solo un poquito.
Te prometo no olvidarte nunca, y hablarle de ti y de tus pilladas a mis hijos, de como te reías y robabas piquitos de la despensa y de tu forma de aguantarnos a todos.
Abuelo, eres grande, muy grande.
Si alguna vez lees esto desde el cielo, recuerda que te querré, te quise y te quiero.