Fría despedida

Para Chifuyu Matsuno:

Querido Chifuyu...

Eso ha sonado muy formal o estúpido...

En fin, no sé cómo empezar a decir esto, ya que las palabras nunca han sido lo mío.
Creo que debería comenzar por agradecerte todo lo que has hecho por mí a pesar del daño que yo te provoqué.

Has sido alguien muy importante en mi vida, así que no quiero que me compadezcas ni que sientas pena por mi culpa, después de todo, no lo merezco.

Sinceramente, nunca esperé que me perdonases después de lo que pasó en el Halloween sangriento, pensé que me odiarías y me guardarías rencor durante toda tu vida, pensé que desearías mi muerte con toda tu alma, como yo hacía diariamente, no me soporto a mi mismo, me doy asco por todo lo que causé.

Pero no fue así. Salí de prisión sabiendo que no tenía sitio alguno donde quedarme ni ganas para continuar con vida. Pero ahí estabas tú esperando y ofreciéndome un lugar donde vivir y un motivo para no terminar con todo: quedarme junto a ti.
Ese gesto de amabilidad por tu parte me conmovió, sentí unas fuertes ganas de llorar y abrazarte, pero no me vi con corazón de hacerlo, de todos modos seguía siendo un asesino, un despiadado asesino que te quitó alguien muy importante.

Con el paso del tiempo me enseñaste lo que es amar. Me sentía muy extraño. Cada día cuando me levantaba no me hacía falta la luz del Sol, tu sola mirada me alumbraba y me hacía sentir un cosquilleo en la tripa el cual era placentero sabiendo que venía gracias a ti.

Eras y eres lo único que pasa por mi mente. Y yo esperaba ser el único que habitase en la tuya. Ja... Que ingenuo, ¿cierto?
Fui muy egoísta al pensar eso, y lo admito, aún quiero que seas solamente mío, pero eso no es posible...

Cuando Baji seguía con vida, recuerdo como le mirabas, tú le querías mucho... En su momento no me importó, pero ahora siento mucha rabia de tan solo pensar en que le amabas a él y no a mí. Cosa que también fue egoísta por mi parte. No pude alegrarme por los sentimientos de mi amigo...

¿Sabes, fuyu? Estos últimos años han estado maravillosos, me reintegré en la banda, me divertí en el trabajo de la tienda, me metí en algunos líos, forjé nuevas amistades... Pero esos no son los motivos por los cuales estos años han sido preciosos, el verdadero motivo fue porque todo eso lo hice contigo.

Aún recuerdo tu cara cuando les di leche de vaca a los gatos, con esa expresión tuya tan mona me tiraste de los mofletes y dijiste "¿pero tú estás tonto o gilipollas?" jaja... Nunca me cansaría de escuchar tus broncas, nunca me cansaría de ti.

¿Te acuerdas esa vez que montamos una fiesta para la inauguración de la tienda y luego tuvimos que llevar a rastras a un Mikey borracho hacia su casa? Jajaja, esa nunca se me olvida, todo estaba hecho un caos, nuestros amigos borrachos echados por todas partes, la tienda patas arriba, ¡recuerdo que hasta había lencería tirada por el suelo! Sin duda esa fue una noche muy loca.
Pero la parte graciosa llegó después, cuando Draken ya se había marchado y dejó a esa pulguita ebria con nosotros.
Llevando a Mikey hacia su casa y tomándole cuidado, sentí como si eso fuera cuidar a un bebé, y no me desagradó nada la idea de plantearme adoptar uno contigo... Verte tan atento y preocupado como si fuera tu propio hijo me dio ganas de formar una familia junto a ti.

Porque ¿sabes? Chifuyu Matsuno, aunque esto vaya a sonar como una cursilería, yo te amo, y con locura, lo he hecho des de hace tiempo. Así que ahora que está todo dicho, no te pido un adiós, con tan solo saber que estarás bien podré irme en paz y harmonía.

Sí, soy un cobarde por no decirte nada de esto cara a cara, ¿pero qué esperabas de alguien como yo?

Ja... Bueno, ya creo que es la hora de mi partida, así que aquí me despido de ti. Te amo y ese sentimiento siempre quedará gravado en mi corazón.

Esta es mi última carta para ti Chifuyu, sé feliz

Adiós y feliz año nuevo.

-Kazutora