Todos están en problemas.

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Los Fanfics salvaron al mundo.

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Aquel día, era un día hermoso y tranquilo. Aparentemente, sería recordado para siempre como el último día pacifico en el mundo del cultivo.

Esta historia explicaría porqué.

Todo comenzó en Gusu Lan.

Tanto los discípulos de la secta anfitriona como los discípulos de las sectas invitadas lanzarían al cielo linternas hechas por ellos mismos para pedir un deseo.

─ Deseo que mi hermano menor pueda estar sano y salvo toda su vida. ─ Este fue el deseo de Wen Qing, doctora de la secta Qishan Wen, refiriéndose a su querido hermano, Wen Ning de la misma secta.

─ Yo, Wei Wuxian, deseo poder estar siempre del lado de la justicia. Y vivir sin arrepentimientos. ─ fue el deseo del nombrado Wei Wuxian, discipulo principal de la secta Yunmeng Jiang.

─ Deseo poder graduarme satisfactoriamente y no tener que regresar nunca a este lugar. ─ Pidió Nie Huaisang, de la secta Qinghe Nie.

Luego de que las primeras linternas volaran por el cielo azul, quizás los problemas comenzarían.

Todo es culpa de Jin Zixuan, en opinión de Wei Wuxian.
Nadie lo mando a tratar de manera grosera a su shijie, Jiang Yanli.
Que para desgracia estaba comprometida con el Jin Pavo Real Zixuan.

El cultivador de ojos grises de nombre de nacimiento Wei Ying encaró al heredero Jin dispuesto a desafiarlo, antes de que este mismo huyera del lugar como un cobarde.

No era un secreto para nadie que hubiera tensión entre los Jiang con el Jin, en especial el hermano adoptado que podía tomarse la libertad que enfrentar a Jin Zixuan.

Milagrosamente, la que todos temían lo que fuera una batalla entre los dos poderosos cultivadores, jamás llegó.

Hasta donde las reglas de Gusu les permitían, los discípulos mayores llegaron lo más pronto posible con un importante anuncio.

─ Todos los discípulos y herederos invitados deben recurrir al salón principal de manera urgente. ─ habló el líder encargado de guiarlos.
─ En especial la secta Wen. ─ agregó, mirando seriamente a la representante, quien era Wen Qing.

Entonces allí estaban. Repartidos por el salón, organizados por secta. Murmurando por lo bajo.
Preguntándose ¿Qué había ocurrido?

En especial las sectas menores preocupadas, pues se había mencionado sobre el asunto urgente relacionado con los Wen.

Y no era nada nuevo que la secta de Qishan velozmente se había convirtido en la más poderosa del mundo de la cultivación. Muchas veces abusando de su poder.

Los rumores sobre una posible guerra por el dominio de todas las sectas prominentes eran el temor y la alerta de todos. En cualquier caso, tendrían que estar preparados. En cualquier momento, lo peor podría pasar.

Los presentes guardaron silencio al momento que Lan Xichen, futuro líder de la secta Lan, ingresó al salón junto a Lan Wangji, su hermano menor.

─ Doctora Wen ─ el prestigioso Lan Xichen primeramente hizo una reverencia en respetuoso saludo. ─ Tenemos un asunto completamente inesperado que necesita ser atendido. Involucra a la secta Wen, siendo usted la embajadora presente de su clan le pido que se reuna conmigo de manera urgente, en este preciso momento.

En lo que el jade mayor intercambiaba palabras con Wen Qing, Lan Wangji estando de pie a su lado, no pudo evitar dar una mirada fría y discreta a todos los presentes.
Y puede que sin querer haya hecho contacto visual con Wei Wu... Wei Ying.

Este chico no dudo en mostrar sus blancos dientes en su gran sonrisa al darse cuenta que Lan Zhan lo estaba mirando, incluso sacudió su mano en forma de saludo como si lo lo hubiera visto en años a pesar que hace minutos atrás habían pasado toda la tarde juntos.

─ Baja la mano. ─ Jiang Cheng lo regañó. ─ Te comportas como un niño. 

─ A-xian tiene tres añitos.

─ No me salgas con esa estupidez ahora. ─ El heredero Jiang rodó sus ojos con fastidio.

Jiang Yanli estaba presente con ellos, siendo representantede de su clan junto a Jiang Cheng. Quizás estaba algo desanimada como para intervenir entre sus hermanos en aquel trivial intercambio.

Por otro lado, Lan Wangji deseaba desde lo profundo de su corazón estar tan relajado, tan despreocupado como lo estaba Wei Ying en ese momento, en todo momento desde que se conocieron mejor dicho, que sin dudar le había regalado otra de sus brillantes sonrisas.

Porque Lan Wangji sabía que no volvería a estar tranquilo desde que se enteró de lo que pasó. Un presentimiento amargo le decía que aquel asunto muy probablemente se les salga de las manos. E incluso empeore hasta donde pueda empeorar. El peor escenario en su mente era una sangrienta guerra contra la ira de la secta Wen.

Antes de marcharse a la reunión aparentemente de emergencia, Lan Xichen tuvo la decencia de dedicarles unas palabras a sus huéspedes.

Por un momento antes de alzar la voz, dudo por escoger las palabras adecuadas. Nunca antes en la historia de su secta había ocurrido algo semejante. Dio un breve vistazo a su hermano menor antes de voltear y tomar coraje.

─ En este momento, la secta Lan de Gusu se ve comprometida en un asunto... delicado. Sin embargo no tienen por qué alarmarse. Mientras decidimos que cartas tomamos sobre este asunto, les pido mucha paciencia. Y las más sinceras disculpas en nombre de esta secta por las molestias ocasionadas, haremos todo lo posible que esté a nuestro alcance.
Por ahora, deben permanecer en este salón. Nadie puede salir hasta que hallemos al o a los culpables.

Todos escucharon atentamente a las palabras del Lan hasta que éste recitó su última frase que hizo que la mayoría se alborotara. En efecto, las puertas estaban cerradas y custodiadas por discípulos Lan.
Pronto la inquietud y las preguntas crecieron en todos.

Los discípulos solo le dejaron el paso a los gemelos de Jade, junto a Wen Qing junto a Wen Ning que la acompañaba a petición de ella.

Una vez que la puerta se cerró, los discípulos invitadoa rompieron las formaciones para hablar entre ellos y algunos fueron directamente a preguntar que rayos pasaba a los discípulos Lan. Sin éxito puesto que incluso ellos no sabían que había ocurrido.

─ Hermano Wei, Hermano Jiang. Ah y señorita Jiang. ─ El escurridizo heredero de los Nie, Nie Huaisang se apareció ante el trio de Yunmeng para expresarse─ Esto es una locura ¿No es así? ¿Qué piensan que haya pasado? ─ el pequeño Nie preguntó aparentemente asustado. ─ El suspenso me está matando.

─ Sea lo que sea, no debe ser bueno. ─Jiang Cheng sentenció, en su rostro mostraba su habitual ceño fruncido.

─ Apuesto a que Lan Zhan sabe. ─ Wei Wuxian sonrió al mismo tiempo que calculaba como iba a sacarle la información al frío jade.

─ De seguro es por tu culpa ¿Ahora, que tontería hiciste?.  ─ El Jiang ya estaba medio harto del comportamiento de su adoptado hermano en especial el trato que este le daba a Lan Wangji. Entonces, lanzó aquella acusación arriesgándose a una escena de drama.

No estuvo muy errado puesto que el joven de ojos grises se llevó ambas manos a su corazón mientras fingía que estaba a punto de llorar, fingiendo estar verdaderamente dolido.

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