Capítulo 2

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- Bien, ya me voy chicos, regreso el domingo en la tarde -

- Está bien Deku-kun, solo ten cuidado y recuerda no hablar mucho -

- Claro, lo tendré muy en mente Uraraka-san -

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- ¡Oi! ¡Deku! - Grito para llamar la atención de Midoriya, este al escuchar el apodo se detuvo y giro levemente su cabeza para ver directamente a su amigo de la infancia

- Oh, ¿Qué sucede Kacchan? -

- No te hagas el tonto, ya dime qué enfermedad tienes -

- Amm, aún no lo sé, por eso voy al doctor -

- Bien, entonces, no te molestará que valla contigo para ver qué es lo que padeces -

- Yo no tengo ningún problema, pero Kacchan de seguro tiene cosas más importantes que hacer que acompañarme -

- Es cierto que tengo mejores cosas que hacer, pero quiero ver qué es lo que le estás ocultando a todos los demás -

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- Bien, ya llegamos, este es el consultorio del doctor que me atiende desde niño, así que no tienes que preocuparte -

- Yo no me preocupo, solo quiero saber tu secreto -

- Lo que tú digas Kacchan, entremos de una vez -

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- Buenos días doctor -

- Oh, pero si es Midoriya Izuku, ya tenía tiempo que no venías por aquí, oh y veo que vienes acompañado, ¿quien es él? ¿Es acaso, Bakugou Katsuki? -

- Si, el es Kacchan, me acompaño para ver qué es lo que tengo -

- Mmh - Dijo en modo de respuesta el cenizo

- Muy bien, entonces, dime, que es lo que te sucede -

- Pues la verdad, es que ayer, en la cena, tuve un ataque de tos muy fuerte que me lastimo la tráquea y garganta, tocí sangre y asusté a mis compañeros, amm... Ah sí, una de mis compañeras me dejó inconsciente para que dejara de toser -

- Mhm, ya veo, parece ser que hay algo obstruyendo algunas partes de tus pulmones y tráquea, te daré una orden para que vallas a hacerte unos rayos x, para descubrir que es lo que te está pasando, pero, ¿hay algo que no me estás contando? -

- Oh bueno, eso quiero hablarlo a solas con usted, es algo bastante complicado y... - Miro a su acompañante dándole a entender si podía salir un momento del consultorio

- d'accord lo entendí, ya salgo - Respondió con obviedad mientras salía del cuarto

- Ahora si, dime qué es lo que ocurre -

- Vera doc, hace unas semanas fui al hospital con mamá y el doctor me dijo que tenía Hanahaki me explico todo sobre la enfermedad, pero, la verdad es que yo no quiero dejar de sentir atracción por esa persona... Así que decidí que esperaría hasta que está me matará, pero, ayer cuando me dió el ataque, me di cuenta que los medicamentos que me dió, no son de ayuda, así que quería pedirle si usted podría hacerce cargo de mi caso - Hablo el pelo verde sin saber que su amigo de la infancia escuchaba todo a través de la delgada puerta de abeto

- Puedo llevar tu caso, pero tengo que decirte que si tienes que hacerte esos rayos x, si puedes hacerlos hoy y venir más tarde sería bastante bueno, pero cabe recalcar que está enfermedad no es muy conocida por las personas y está en tu mano si decirle a las personas que te rodean de esta condición

- Si, lo sé, se los diré después, mamá ya lo sabe, se puso muy triste pero sabe que es mi decisión así que decidió que me cuidaría hasta el final

- Bueno Izuku, te deseo la mejor de las suertes y espero que tú mamá se encuentre bien -

- Claro, entonces iré a hacerme los rayos x -

- Si, por favor, les dices que los necesitas para el Doctor Toma, a ver si así te los hacen más rápido -

- Está bien, volveré en unas horas entonces - Dijo levantándose de la silla y abriendo lentamente la puerta para salir mientras se despedía del doctor

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- Entonces... ¿Iremos a qué te saques unos rayos x? -

- Oh, tu no tienes que venir si no quieres Kacchan, pero si gustas acompañarme no hay problema -

- Iré solo porque quiero, no porque me estés diciendo que te acompañe -

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- Muchas gracias señorita - Agradeció amablemente Izuku a la señorita que le entregaba las radiografías

- No hay de que joven, como ya pagó, ya puede retirarse -

- Claro, gracias otra vez -

- Si, para eso estamos, que le valla bien -

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- Aquí están Doctor - Dijo entregándole las radiografías

- Si, ahora veamos que tan avanzada está esta cosa -

- Exactamente ¿qué es lo que tienes? - Susurro Bakugou a Midoriya intentando que le dijera que es lo que lo tenía tan enfermo

- Supongo que no puedo ocultarlo de ti ¿No? -

-Mm -

- Tengo Hanahaki, se me desarrollo hace unas semanas, pero a avanzado más rápido de lo que esperaba, así que decidí venir al doctor para que me dijera que hacer -

- ¿Hanahaki?, ¿Qué no esa mierda se puede quitar con cirugía?

- Si, pero se corre el riesgo de morir, de no no volver a amar y la más común es no volver a sentir algún sentimiento hacia la persona por la que en algún momento sentiste algo - Respondió el doctor

- Entonces... ¿Te vas a quedar con ella? -

- Mhm, si, así que no le digas nada a los chicos, se los diré cuando la tenga controlada - Sonrió de una manera forzada, intentando aparentar que todo saldría bien

- Bueno... Lamento interrumpir su momento de confección pero tienen que ver esto - Hablo el doctor señalando la pantalla de luz que sostenía la radiografía

- ¡¿Esos son mis pulmones?! -

- Así es, parece ser que los medicamentos que te dieron, no ayudan a que se detenga, tu caso no es normal, normalmente el Hanahaki es de rosas o cuando mucho claveles, pero las tuyas son peonías, una flor muy hermosa, pero las raíces son más gruesas y duras, además, estás se extienden solo dentro de tu pulmón, no parecen avanzar hacia el corazón, así que si piensas vivir con esto, te calculo unos 2 meses de vida feliz, pero en las últimas semanas del segundo mes, empezarás a quedarte sin garganta, sin fuerzas, no podrás hablar, llevarás una dieta líquida y muy probablemente ya no seas capas de moverte por ti mismo.

- Pero... Si esa persona especial corresponde mis sentimientos en los últimos 2 meses, me curare y podré seguir con mi vida feliz, ¿Correcto?

- Si, es correcto, pero Hanahaki es considerada una enfermedad terminal ya que por algún motivo exacto llegaste a tenerla, y es que la persona nunca va a sentir lo mismo que tú, aunque existe un 1.005% de posibilidad que suceda, pero es solo el 1%, no está garantizado

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- Gracias por acompañarme hasta casa de mamá Kacchan...

- Si, como sea, por cierto... La persona a la que amas, crees ¿qué pueda llegar a sentir algo por ti? -

- No lo creo... Él es muy diferente a mi y ni siquiera me voltea a ver, sería muy difícil que llegara a amarme -

HanahakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora