Mi destino (LRDF2 )

T2 MI DESTINO

Yeimy

Sabía que el no me dejaría ir, pero tenía que hacerlo. Ellos son mi prioridad.

-Esta bien pues, vamos a dormir- le dije sabiendo que su sueño era muy pesado, y entonces yo podría salir fácilmente.

-Voy por la princesa- me dijo y asentí. Nuestros encuentros se daban en casa de Ligia, y como ella era quien se encargaba del cuidado de mi pequeña, pasaba mayor parte del tiempo ahí.

Charly la trajo dormida entre sus brazos, -Tan bella- murmure y el sonrió, luego la acostó en el medio de ambos.

Mi pequeña se removió un poco, y note lo dulce que se veía al dormir. La misma manera que Charly.

Ambos nos acomodamos a los lados de la princesa, observamos como dormía y luego nuestras miradas se chocaron.

-Duerme- le susurre, acaricie la mejilla de mi Alma y la de el. Vi como de a poquito se dormía y cuando lo sentí profundo me levante.

Me dolió demás dejarlos, pero estaba dispuesta a dar la vida por ellos si fuese necesario.

.......

Llegue a casa, entre a la habitación por una pijama y salí de ahí rápidamente, fui a la habitación de Emilio para dormir junto a él.

Me cambie y me recosté a su lado, lo observe dormir y no pude evitar pensar en mi bebé, la estaba dejando sola cuando más me necesitaba.

......

La mañana siguiente fue más tranquilo, Juan se marcho de casa dejándome sola con el niño.

-Pecesita podemos ver una película- asentí triste, extrañaba demasiado a Alma.

-Estas triste por tu bebé, pecesita por qué almita no vive con nosotros- me dijo Emi mientras íbamos a la habitación.

-Ella vive con su papá y....- me interrumpió, -El parcerito, lo extraño mucho. Podemos ir a verlos- negué aún más triste.

-Es por mi papá, el es malo. Pecesita yo te voy a cuidar, a ti y a Almita- le sonreí y el me abrazo.

Emilio definitivamente era un niño muy tierno y amoroso.

-Gracias mi mono- le dije sincera, -Yo quiero vivir con el parcero, Almita y contigo. ¿Podemos?- lo abrace para después besar sus mejillas.

......

Estábamos viendo Spirit en Netflix, cuando la puerta empezó a sonar. Emilio me pidió abrir la puerta y lo deje mientras iba al baño.

Demoro mucho así que baje par ver quien era, y me fue inevitable no llorar cuando vi que era Charly y Alma; ella estaba llorando con mucho sentimiento.

-¿Que haces acá?- le pregunte mientras tomaba a mi bebita.

-Ma...ma....amo  yo- mi princesa se aferró a mi negándose a soltarme, -Mi ama me dijo que vio una foto tuya en casa y la tomó. De ahí no paro de llorar- la abrace aún más.

No estaba dispuesta a separarme de ella, -Ya mi amor, mami ya está con vos- le susurre y ella me miró a los ojos.

Los mismos ojos de su padre, -Mami taño mucho- sollozo y el dolor que sentí fue inmenso.

Jugué con mi hija mientras Charly lo hacia con Emilio, -Es muy linda- oí a Emi decirle a Charly.

-Cuidadito que es mi princesa- le dijo con tono divertido, y  mi mono solo sonrió.

Ese día agradecí  que Juan no llegará a casa, ellos durmieron ahí en casa y mi pequeña se negó a dormir en otro lugar que no sea junto a mí y a Charly.