Ú N I C O

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La brisa fría chocaba contra su rostro, podía sentir la lluvia ligera empapándolo, el aire helado le calaba las fosas nasales dejando su nariz y pómulos rojos. Hizo una mueca por el gélido ambiente y se bajo la máscara para evitar que el aire y las gotas de lluvia golpearan de lleno su rostro.

-. ¡¿Todo bien por ahí, joven Midoriya?!

-. ¡Todo bien!

Elevó el pulgar hacia el hombre al pie del edificio parado cerca de su auto y recibió el mismo gesto a cambio. Daba su última ronda a ese barrio. Una familia se encontraba viviendo de forma normal en casa, se negaban a ir a uno de los refugios a pesar de que casi casi se había arrodillado intentando hacerlos entrar en razón, como lo ignoraron no le quedó de otra que vigilar por sus bienestar y deshacerse de cualquier villano cerca si es que había, aun así Endeavor iba a mandar a un héroe a la zona después de que se fuera para dejarlo tranquilo.

-. Bien - Murmuró para sí mismo dando un asentimiento conforme, su trabajo ahí estaba hecho.

Comenzó a prepararse para saltar entre los edificios hasta la siguiente zona que aún no estaba marcada como A salvo pero antes de que siquiera diera un paso hasta la orilla de la "ventana" del edificio, una voz a sus espaldas lo congelo.

-. Luces como un puto vagabundo.

Esa voz. La reconocería aunque todo Japón decidiera querer hablar en ese momento. Rasposa, brusca y ronca. Tragó gordo sin moverse en lo absoluto, esperando.

-. ¿Hace cuánto no te das un jodido baño?

Casi se ríe por ello. En realidad se había bañado esa mañana, All Might siempre estaba fastidiando con lo de la higiene y Beast Jeanist lo apoyaba diciendo que así evitaría infecciones...eso y que no era elegante no bañarse. Pero tampoco es como si pudiera darse el lujo de lavar su traje de héroe y ponerlo a secar.

-. Hueles a que estas a punto de echarte a perder - Siguió refunfuñando - El aspirante a ser el símbolo de la paz, mugroso, que mierda.

-. ¿Hay más? - Preguntó sin voltearse, consideraba las opciones de si decidía hacerlo -voltearse-, a sí decidía salir corriendo.

Escuchó un resoplido a sus espaldas seguido de pasos pesados y lentos.

-. Solo yo, ¿quién más podría entender esa mente patética tuya?

Se relajó y solo así dio un suspiro girando sobre su eje algo nervioso. Ahí estaba, frente a él, con una expresión de molestia y su traje pulcramente puesto, recorría la habitación con aburrimiento. No había nada interesante, ni siquiera había estado allí antes, era solo el lugar más alto del edificio, el muro de la ventana estaba totalmente destruido dejando entrar el agua y el viento, y un montón de escombros se esparcían por el suelo. El rubio se preguntó si era porque Izuku acababa de pelear.

-. ¿Entender?

-. Un lugar alejado de U.A pero también desde donde puedas verla y al mismo tiempo donde haya gente que necesite ayuda - Murmuró pasando los dedos por un libro sobre un escritorio con desinterés - Además que en todos los lugares antes de aquí no hay ni un solo villano pero en la zona que sigue me tope con un par de inútiles - Elevó la cabeza para verlo directo a los ojos - Jodidamente obvio. Regrese y aquí estás, como una estúpida desgracia andante.

-. Eres genial Kacchan - Fue lo único que pudo decir.

¿Por qué no lo encontró antes? Porque no lo había buscado, estaba tan furioso, ese idiota de Izuku actuando como un mártir y dejándole solo una ridícula carta frente a la puerta de su habitación, no tenía pensado salir en su maldita búsqueda como un sabueso pero tenía que actuar antes de que los demás lo encontrarán, después de eso no lo dejarían ni a sol ni a sombra, estaba seguro. Tal vez este iba a ser el único momento a solas que tendrían en muuuucho tiempo.

"Es una puta promesa" - One Shot DekuKatsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora