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Al llegar la mañana, sintió un peso extra en su pecho, y en ese momento su mente empezó a procesar lo que había pasado, había marcado a su Omega, se habían entregado en cuerpo y alma, confiando en el otro su primera vez, disfrutando el momento, y sin poder evitarlo una sonrisa traicionera se abrió paso en su rostro, se sentía diferente, tranquilo y completo.

Bajo su mirada encontrando a su Omega plácidamente dormido sobre el, en su tiempo de soltería si le hubieran dicho que tendría un Omega marcado y despertar junto a él sería una maravilla, se hubiera reído pues jamás se imagino de esa manera, pero ahora que estaba ahí viviendolo, se sentía maravilloso, verlo tan lindo durmiendo, mientras en su cuello se posaba una marca de amor recién echa, completamente desnudo al igual que el, y el cuarto lleno de sus aromas mezclados, simplemente el paraíso, daría todo por despertar a lado de él a partir de ahora.

- Buenos días Kookie

-  Mmmh buenos días amor, ¿Cómo te sientes? ¿Te duele algo?

-  Nop estoy perfecto, pero necesitamos un baño urgentemente

-  Parate vamos a bañarnos para bajar a hacer el desayuno… Amor

-  Mh ¿Mande?

- Parate

- Eehhh parate tu primero si.

- Amor- dijo con una risa nasal- no te de pena cariño, ayer conocí todo tu cuerpo, así que parate y nos bañamos

- ¿Juntos?

- Aja, tenemos que ahorrar agua mi amor

- Ooh fijate ahora me saliste ahorrador de todo

- Siempre e sido ahorrador

- Claro, te creo pervertido

Saliendo de una relajante ducha, con un par de manos traviesas por parte de Jungkook, bajaron listos para hacer el desayuno.

- ¿Qué vamos a hacer amor? A mi se me quema hasta el agua

-  Tenías que ser Jeon Jungkook, apártate novato yo haré el desayuno tu ve a acomodar la mesa

Y el decir eso se sentía tan bien, que aumento el deseo por parte de ambos el de vivir juntos.

-  Ya esta listo el desayuno, ayúdame a llevar las cosas

Su desayuno consistía en unos panqueques, con leche de platano que era lo que más había ahí.

- Tenemos que ir al supermercado Jungkook, tu alacena esta vacía y en el refrigerador solo quedan leches de platano

- Amor, pero yo casi ni ocupo la cocina

- ¿Entonces como le haces para sobrevivir? Ah

- Bueno pido a domicilio, a veces como con mis papás, o con Yoongi y Namjoon

- No, pésimo, si comes siempre en la calle te va a hacer daño ¿Quién te confirma que aplican la higiene al preparar las comidas?

-  Amor son restaurantes donde eso es lo que te prometen

- Uy perdone usted señor millonario

- Bueno hagamos esto, vamos al supermercado a comprar las cosas, solo si tu eres el que viene a prepararme comida para el desayuno, el almuerzo la comida y cena

- Trato echo, aunque ¿Quieres que te mande lonche? Porque inicias a trabajar en la empresa y no creo que puedas almorzar y comer en tu casa.

- Si quiero que me mandes lonche

- Perfecto

- Amor

- ¿Mmh?

-  ¿Te gustaría mudarte aquí conmigo?

Ante las palabras del alfa Taehyung se ahogo con su panqueque

- ¿Lo estás diciendo encerio?

- Si, digo bueno igual si tu quieres

- Me encantaría- y no espero respuesta del alfa, se aventó a su regazo poniéndose a horcajadas- aunque primero tenemos que hablarlo con mis padres.

- ¡Cierto! Tus padres, van a matarme, te quedaras sin alfa, de una vez te digo que te dejo todas mis riquezas pero por favor no me olvides, le cuentas a mis hijos que su padre murió por amarte

- Yaah Jungkook no seas exagerado- dijo dándole un golpe en la cabeza- en primera quizá si te maten, y en segunda, ¿cuáles hijos? Ni siquiera estoy embarazado

- Bueno eso lo podemos arreglar cariño – respondió alzando al Omega y llevándolo a la habitación. Después pensaría en cómo le diría a sus suegros.

~MI OMEGA ESPECIAL~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora