Capitulo 2

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Capitulo 2: Celestina.

Una celestina, en su época,  era una persona que solía  procurar, encubrir o facilitar una relación amorosa o sexual entre dos personas. 

Fui la celestina de Chestter Jestack muchísimo tiempo, ser mejores amigos, lo convirtió en un ser casi familiar y de tanto rondar por mi casa, logro conquistar el corazón de mi hermana Helena,CJ o como mi hermana le dice, Chees, logro conquistarla a base de logros, ella y yo somos bastante similares pero demasiado diferentes a la vez.

Helena y Chees eran dos personas totalmente iguales, solo por un pequeño detalle. Chees era mi persona en el mundo. El podía amar a  mi hermana tanto que podía lastimar a cualquiera que llegara a tocarla en contra de su voluntad, sinembargo, cada vez que me sentía mal, solo era suficiente mirarlo para que el estuviera para mi, a veces ni siquiera era necesario decirle lo que me pasaba.Desde que murió mi mama el estuvo ahí para mi, tan incondicionalmente. 

CJ es un chico que con solo mirarlo se te caería la baba, un hombre encantadoramente adicto a la cafeína , tan sarcástico que podía llegar a confundirte y con una tediosa aura a sobreprotector, y lo es, solo cuando el asunto es serio, pero al final del día, cuando se quitaba los zapatos y nos tirábamos a ver pelis en un sillón, el era una diva total.  Si vamos a hablar del físico, por supuesto que no estaba nada mal, practicaba deportes tres veces a la semana y ayudaba a su padre, por las tardes, en la empresa de construcción, para que el un día la heredara y nunca olvide sus raíces. CJ es un gran chico, ademas de estratégico, tenia un intelecto y una labia que te cagabas, podía hacer con solo dos palabras que el mismísimo presidente te cante el feliz cumpleaños,pero no lo hacia porque debía dormir siesta, como es de esperarse, estudia la licenciatura en administración de empresas sinembargo, su sueño frustrado es trabajar para el FBI, todo lo que lleve a un completo misterio siempre lo atrajo. Pero nuestros padres siempre tienen otros planes para nosotros.

CJ y Helena eran un noviazgo por conveniencia que resulto en éxito total, ellos ya se querían y tenían la suficiente intimidad como para ser una pareja formal, excusando que, nuestras familias no debían enterarse, entonces acá me presento, fui su celestina, bueno, teniendo en cuenta la cantidad de veces que saco a CJ por la ventana, mientras Helena distrae a papa, creo que todavía lo soy.

Y ahí estaba, sentado en uno de los taburetes de la cocina, mirando sin ningún tipo de disimulo a la pequeña Bethannie, ya había pasado una semana desde su llegada y todo había sido un caos por todos lados, como era de esperarse Helena la odio desde el primer momento, por otra parte, me agradaba sentir que tenia a una hermana menor que cuidar, me era totalmente divertido y era sorprendente su pequeño ingenio. Beth era demasiado parecida a Helena a su edad, con el pequeño detalle de su color de pelo, Helena era rubia al igual que yo, pero Beth tenia un pelo anaranjado que podría simular el color del fuego.

_Sabes?- levanto la mirada de su libro- si vas a mirarme así, primero deberías invitarme a tomar un café- un desconcertado CJ me miro y yo solté la carcajada.

_Así se hace pequeña- y chocamos los cinco.

_Se nota que son parientes- comentó molesto, pero sus ojos brillaron y ese era el brillo que tenia solo cuando miraba a mi Helena y supe entonces que entro en la cocina. Beth se levanto y se encamino a su cuarto, sin soltar palabra alguna.

Su relación había estado tensa y tirante, Beth no contestaba a ninguna de las agresiones o comentarios de mal gusto que Helena le lanzaba, y eso hacia que se sienta peor, al no poder hacerla enojar, y entonces tenia que actuar de intermediaria para que Beth huya y yo simplemente calmara a la fiera. Había sido todo un caos, la relación que Helena tenia con papá o la que por lo menos los hilos de contacto que tenían, se había cortado, todo, absolutamente todo. No hablaban desde que ella llego y no la culpaba, yo tampoco le dirigía la palabra, ni siquiera CJ lo hacia. Cuando llegaba del trabajo temprano, todos desaparecíamos, incluso, me animo a decir que Celeste estuvo cocinado toda la comida que a papá no le gusta con tal de molestarlo y que no comiera en casa.

_Menos mal que se fue- soltó con un suspiro Helena e hizo que se llevara una mirada fea por parte mía y de CJ, levanto las manos como si fuera una acusación indirecta, pero en su mano derecha tenia una carta- solo digo, no se como se sentirá si ella viera esto. 

Dejo la carta en la mesa, la tome, por supuesto ya estaba abierta. En el sobre no solo estaba una carta sino, un recorte periodístico donde decía "EMPRESARIO DEL AÑO RECONOCE A UNA DE SUS HIJAS SIN APELLIDO" y claro mas abajo explicaba la historia con lujo de detalles, exagerando cada parte pero describiendo a la perfección  esa mañana en la que nos enteramos acerca de Beth. Las manos me temblaron y la punta de los dedos se me enfriaron. CJ leyó la carta por mi, en voz alta , pero algo del recorte periodístico me resonó ¿"SUS"? ¿Acaso habían más? y ¿por que aparecen ahora?.

Desconcentrada  y sin haber escuchado una sola palabra de CJ lo miré y eso basto para que comience con un resumen que logre entender.

_Otra hermana, llega el miércoles- soltó a la ligera, me atragante con el té y mientras intentaba respirar con normalidad, me dio dos golpes en la espalda- ¿puedo ver la carta de la madre de Beth? Hay algo que no me cierra.

CJ tenia la cualidad de decir las peores cosas con un tono que te ayudaba a sobrellevarlo, pero la noticia de otra hermana era algo bastante perturbador, ¿acaso papá había estado dejando descendencia por todo el mundo?¿que buscaban estas mujeres de él? y lo más importante,  ¿por qué ahora?.


Se acercaban las ocho de la noche y se suponía que papá debía estar llegando a casa, todos tomamos asiento en la mesa del comedor que casualmente estaba cerca de la entrada principal y las escaleras para las habitaciones, si él se asomaba nos vería a todos, bueno, no eramos todos, CJ se había ido luego de tomarle fotos a las cartas y el recorte periodístico. Me encargue de hablar con Beth y no le pareció en lo absoluto descabellado el echo de que tenga otros hijos.

 Mientras tanto, a Helena y a mi se nos pinchaba cada vez mas la idea de nuestro padre y toda aquella idealización infantil que teníamos, todo se estaba cayendo a pedazos, todo se sentía como una traición directa hacia nosotras, pero no era así. 

Helena tomo la cabecera de la mesa, yo estaba a su derecha y Beth en su izquierda, con las cartas en la mesa y todas tomando té de manzanilla. El silencio sepulcral que yacía en la habitación enfriaba el ambiente, todas mirábamos fijamente la entrada hasta que él entró. Cuando nos vio sonrió pero al notar realmente la intención de la situación, palideció.

_¿Y ahora que hice? 

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Holaaaaaaaa, no se olviden de votar y comentar, gracias a todos los nuevos lectores y a mis amigos que cada vez me bancan más en esta locura. 


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⏰ Última actualización: Jan 27, 2022 ⏰

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