yo en naruto

chunnin

-el albino caminaba de forma tranquila por la aldea hasta que un kunai voló a su dirección, el muchacho ya acostumbrado lo atrapó por el mango-

Vas a tener que ser más original -dijo para que apareciera anko detrás de el-

No hay tiempo para eso sabandija -dijo mientras recibía su kunai en la mano -

Habla o calla - le respondio a su sensei, rara vez aparecía, solo para subir su entrenamiento, misiones y comer alguna rara vez-

Quieres anotarte en los exámenes chunnin?-pregunto la jounnin esperando la obvia respuesta-

Si dame la inscripción, según leí me queda un mes - dijo poniendo su mano para recibir un papel-

Se más respetuoso hablas con alguien mayor que tu- dijo dándole el papel con una pequeña vena en la frente por la falta de respeto del muchacho-

Te acabas de decir vieja -dijo tomando el papel normalmente para guardarlo bien en su bolsillo para asegurarse de que no se pierda-

-derrepente el muchacho sintió que tenía al diablo al lado, una fría mano se poso en su hombro-

Esta vez te daré 10 segundos me siento amable- aviso con una sonrisa tétrica-

-en un abrir y cerrar de ojos el muchacho desapareció en un remolino de fuego para después aparecer en la cabeza del segundo hokage, con quién era bastante parecido, aunque no fuera de su clan-

Te quedan 5 segundos-dijo al lado del muchacho-

Ocultar tu verdadera personalidad con una máscara no te salvará de la perdición, de hecho te llevará más rápido, no vas a hablar con nadie, no vas a confiar en nadie y no vas a siquiera dormir tranquila, se que ese viejo de las serpientes te jugo una mala pasada pero es cosa del pasado y recordarlo no lo va a cambiar -dijo con sabiduría el chico, le había pasado lo mismo solo que de una forma distinta, había entrado en una depresión de la que solo lo pudo sacar el rubio, el pelo tazón, entrenamiento y pasatiempos-

-la jounnin procesaba las palabras del muchacho, no entendía porque el chico paso por lo mismo-

Solo date una oportunidad para pensarlo -dijo para luego pararse de los pelos de la estatua Hokage con un semblante serio y pegar un enorme salto hacia la aldea, dejando que el aire golpee su rostro por unos segundos para después hacer una voltereta cayendo con chakra en sus piernas para amortiguar el impacto

-un sentimiento recorría la mente del muchacho, empatía, un par de lágrimas corrieron por sus ojos y las seco de forma rápida para caminar hacia su zona de entrenamiento, hoy tocaba entrenar Taijutsu con lee-

¿¡Estás preparado para el entrenamiento?!-pregunto lee apareciendo a su lado el chico se sobresalto un poco, el cejon lo noto distraído pero no hablo del tema-

Claro hagámoslo - respondió sonriendo un poco para correr junto a su amigo, aquel entrenamiento fue igual o más duro que ayer aunque no le importaba, Sakura se les había unido y por decirlo estaba menos plana que antes, además de ser más buena con el rubio, lo que el chico agradeció pero ya no estaba atraído por la chica-

-las semanas pasaban y el albino caminaba hasta que vio a Naruto, apareciendo en un abrir y cerrar de ojos cerca de konohamaru para levantar la pierda en el momento que el rubio se dio cuenta-

Una piedra cuadrada no es muy natural que digamos muchachos, aunque la textura está bien-dijo mientras les mostraba una piedra normal mientras la comparaba-

¡¡Entendido jefe!!¡¿quiere jugar a los ninjas?!-pregunto de forma enérgica mientras le ofrecía unos cuantos shuriken de papel y el albino los aceptaba pasándole un par al rubio para correr detrás de los 3 niños con su amigo-