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Ellos me miran. Me observan como cuervos, yo solo sonrío, les sonrío. Intentó mostrarme tranquilo, ellos no saben nada.
Respirar, tengo que respirar, tengo que tranqulizarme, no puedo seguir así.
Ellos piensan que no me doy cuenta, pero, yo sé que me observan, que siguen cada movimiento que hago y escuchan atentamente lo que digo, ellos me odian. Pero, no importa, eso no me importa, yo no tengo la culpa, yo no hice nada.
Mi corazón late con fuerza, como si estuviera intentando decirme algo... No lo escucho. No puedo dejar de mirarlos, ellos atacaran si lo hago, tengo que estar atento, no puedo distraerme, no puedo bajar la guardia.
—Amor, ¿por qué miras fijamente a la pared? Es raro, estás empezando a asustarme —dice Jeongin, y ellos desaparecen.
Mi cuerpo se relaja, y mi corazón parece bajar la velocidad de sus latidos.
Yo sonrío, y miró a Jeongin.
Él se acerca a mí, agarrando mi rostro entre sus manos para acercarme más a él y besarme.
Los besos de Jeongin son los más dulces, sus besos me hacen sentir amado, son una calma para todo mi tormento, él es mi paz, mi ancla, él me mantiene aquí, él me ama, él solo me ama a mí. Yo soy su amor, su único amor.
Rompemos con el beso. Jeongin se sienta a mi lado pasando su brazo por mis hombros, yo recuesto mi cabeza en su pecho, él lleva su mano a mi cabello, y lo acaricia con calma.
——¿Cómo fue tu día, bebé?—— preguntó.
——Bien, lo único malo fue el tránsito, estuve dos horas atascado en la ruta principal—— contestó relajado.
——Te he dicho mil veces que no vengas por la ruta principal, sabes que vas a tardar más viniendo por allí.
——Como es lunes pensé que no estaría tan llena...
——Pensaste mal, bebé—— dije riendo.
——Me crucé con Seungmin y Changbin...
Su tono de voz bajo, y dejó de acariciar mi cabello.
Yo no dije nada, solo mire a la televisión.
——Están juntos ahora, son novios—— cuenta, con un tono bajo——. Dijieron que Felix aún esta en coma, su estado no mejora, pero su madre no quiere desconectarlo... —— Jeongin suelta un suspiro——. En tres meses se cumplen dos años desde el accidente...
Nuevamente, mi corazón comienza a latir con fuerza, mis manos empiezan a sudar y mi pierna derecha a temblar. No le respondo, sigo mirando la televisión.
——Hyunjin, te estoy hablando—— reclama.
——Quiero ver la película, amor—— me justifique con un tono meloso. Lo miré intentando verme tierno.
